Toledo llegó a Perú para responder por caso Odebrecht: ¿qué otros expresidentes han sido relacionados con la constructora brasileña?De izquierda a derecha. Los expresidentes Alejandro Toledo, Alan García, Ollanta Humala y Pedro Pablo Kuczynski.
Sergio Espinoza
26 de Abril del 2023 5:04 PM · Actualizado el 26 de Abril del 2023 8:24 PM
A fines de 2016, exfuncionarios de la constructora brasileña Odebrecht revelaron que, entre 2005 y 2014, pagaron cerca de 29 millones de dólares en coimas para obtener licitaciones en el país. El entramado de corrupción compromete a doce países, y en el Perú a cuatro expresidentes.
En diciembre de 2016, la constructora brasileña Odebrecht reconoció el pago de más de 788 millones de dólares en sobornos en doce países, entre ellos el Perú, en el marco del destape de la Operación Lava Jato, considerada la mayor investigación contra la corrupción en Brasil; pero sin duda una de las más grandes en América Latina.
Los pagos se hicieron en relación con “más de 100 proyectos” en países como Angola, Argentina, Brasil, Colombia, República Dominicana, Ecuador, Guatemala, México, Mozambique, Panamá, Perú y Venezuela, según los documentos del Tribunal del Distrito Occidental de Nueva York.
En el caso del Perú, los exfuncionarios de la constructora brasileña admitieron que, durante el 2005 y el 2014, pagaron 29 millones de dólares para obtener licitaciones. Por este caso se abrieron investigaciones contra los expresidentes peruanos Alejandro Toledo (2001-2006), Alan García (2006-2011), Ollanta Humala (2011-2016) y Pedro Pablo Kuczynski (2016-2018).
A continuación, un recuento de los casos de los expresidentes involucrados en el entramado de licitaciones y coimas.
Pedro Pablo Kuczynski
Tras una reñida segunda vuelta electoral contra Keiko Fujimori, Pedro Pablo Kuczynski llegó a la Presidencia de la República en el 2016. Años atrás, PPK había sido titular de Economía y Finanzas (2004-05) y presidente del Consejo de Ministros (2005-06) durante el gobierno de Alejandro Toledo.
La primera vez que PPK fue vinculado al caso Odebrecht fue en marzo de 2017. Esa vez la Procuraduría solicitó una investigación preliminar por su relación con Latin America Enterprise Fund Managers, una compañía bajo sospecha por supuestos depósitos de la compañía brasileña; sin embargo, el caso fue descartado por la Fiscalía por la falta de pruebas.
En noviembre de ese año, el ex CEO de la empresa constructora, Marcelo Odebrecht, dijo a los fiscales peruanos que, en 2006, al final del gobierno de Toledo Manrique, contrató a PPK como consultor.
Un mes después, se filtró a la prensa un informe de Odebrecht a la comisión Lava Jato del Congreso, en el que la compañía afirmaba que pagó US$ 782 mil a Westfield Capital, empresa unipersonal del exmandatario, por consultorías vinculadas a los proyectos Olmos e IIRSA Norte (tramos 2 y 3 de la Carretera Interoceánica), entre 2004 y 2007, épocas en las que fue ministro de Economía y presidente del Consejo de Ministros.
Las revelaciones de Marcelo Odebrecht ocasionaron que, a finales de 2017, desde el Congreso se promoviera una moción de vacancia presidencial que no alcanzó los votos para concretarse.
A finales de febrero de 2018, el ex director de Odebrecht en Perú, Jorge Barata, aseguró a los fiscales peruanos que la compañía brasileña aportó US$ 300 mil a la campaña presidencial de PPK en el 2011. La revelación ocasionó que varias bancadas presentaran un nuevo pedido de destitución.
El debate no fue necesario. PPK renunció al cargo el 21 de marzo, en medio de un escándalo por la presunta compra de votos de parlamentarios de parte del Ejecutivo para evitar una nueva vacancia.
El 19 abril de 2019, el Poder Judicial aceptó el pedido fiscal de prisión preventiva por un plazo de 36 meses contra el expresidente. Casi una semana después, la Primera Sala Penal de Apelaciones Nacional Permanente Especializado en Delitos de Corrupción de Funcionarios (CSJE) aceptó el pedido para variar esta medida por la detención domiciliaria.
Desde el 2022, el expresidente, de 84 años, afronta en libertad la investigación que se le sigue por el presunto delito de lavado de activos, pero bajo la medida de comparecencia con restricciones.
Ollanta Humala
Ollanta Humala llegó a Palacio de Gobierno en 2011, luego de superar en una reñida segunda vuelta a Keiko Fujimori. Cinco años antes postuló a la Presidencia del Perú y llegó al último tramo de los comicios, pero fue vencido por el líder aprista Alan García.
Actualmente, Humala y su esposa, la ex primera dama Nadine Heredia, afrontan una investigación fiscal la presunta financiación irregular de sus campañas electorales de 2006 y 2011 por parte de la empresa brasileña Odebrecht y el Gobierno venezolano de Hugo Chávez.
En su acusación, el fiscal anticorrupción Germán Juárez Atoche, quien lleva una investigación abierta inicialmente en 2015, ha solicitado 20 años de cárcel para Humala y 26 de prisión para Heredia, acusados del presunto delito de lavado de activos, por no declarar millonarias donaciones con las que financiaron las dos primeras campañas electorales del exmandatario.
De acuerdo con la tesis fiscal, en 2006 el dinero vino presuntamente del fallecido expresidente de Venezuela Hugo Chávez (1999-2013) y en 2011 recibieron supuestamente 3 millones de dólares de la constructora Odebrecht por orden del Partido de los Trabajadores de Brasil, del actual presidente Luiz Inácio Lula Da Silva.
En el marco de las investigaciones, el exmandatario y su esposa pasaron casi diez meses en prisión provisional separados en distintas cárceles, entre julio de 2017 y abril de 2018, hasta que el Tribunal Constitucional ordenó su puesta en libertad por considerarla una medida excesiva.
Una vez en libertad, Humala y Heredia tuvieron que afrontar el embargo de su vivienda y, con ello, la incautación de sus inmuebles como medida preventiva para asegurar el cobro de una indemnización a favor del Estado.
A este caso, se suma otra investigación que afronta la pareja por las supuestas irregularidades en la concesión del proyecto “Mejoras a la Seguridad Energética del País y Desarrollo del Gasoducto Sur Peruano”, valorizado en 7.3 millones de dólares, al Consorcio Gasoducto Sur Peruano, integrado por Odebrecht y Enagás.
Alan García
A pesar de la inflación que caracterizó a su primer gobierno, entre los años 1985 y 1990, el aprista Alan García Pérez fue electo presidente por segunda vez en el año 2006, tras superar en segunda vuelta al líder del Partido Nacionalista Peruano, Ollanta Humala.
Durante su segundo periodo gubernamental, el líder aprista promovió las obras de la Línea 1 del Metro de Lima, la cual había quedado paralizada por más de veinte años. La empresa peruana Graña y Montero formaría un consorcio con Odebrecht para culminar la infraestructura restante en el 2009.
Luego de que a finales de 2016 la constructora brasileña confesara el pago de coimas en Perú, al exmandatario se le abrió meses después una investigación preliminar la presunta comisión de los delitos de lavado de activos y colusión agravada.
De acuerdo con la tesis fiscal, el expresidente habría recibido sobornos por parte de Odebrecht para favorecerlos con la concesión de los tramos 1 y 2 de la Línea 1 del Metro de Lima. En el marco de las investigaciones a Marcelo Odebrecht, en una de sus agendas se halló las iniciales ‘AG’, que coincidían con las siglas del nombre y apellido del exmandatario.
Según dijo la constructora brasileña en esta primera etapa del escándalo, por esa licitación se repartieron 8 millones 100 mil dólares en sobornos.
El 17 de abril de 2019, el Poder Judicial ordenó la detención preliminar de García Pérez en el marco de las investigaciones por el caso Odebrecht. Los integrantes del Equipo Especial, conformado por la Policía y la Fiscalía, llegaron a la vivienda en Miraflores y fueron recibidos por el exmandatario.
El ex jefe de Estado pidió ir a su habitación para comunicarse con su abogado. En ese momento ingresó a su habitación, cerró la puerta y se disparó en la cabeza. Aún con signos vitales el líder aprista fue trasladado al Hospital Casimiro Ulloa, donde falleció a las pocas horas.
Alejandro Toledo
El expresidente Alejandro Toledo es el tercer huésped del penal de Barbadillo, en Ate, tras un largo proceso de extradición de Estados Unidos que tardó cerca de cinco años. En el establecimiento penitenciario también se encuentran recluidos los exmandatarios Pedro Castillo y Alberto Fujimori.
La Fiscalía apunta al expresidente como receptor de 20 millones de dólares de Odebrecht como parte de un acuerdo para el otorgamiento de las licitaciones de las obras de la Carretera Interoceánica en sus tramos II y III.
Los pagos se habrían realizado en forma escalonada en el periodo 2006-2010, de acuerdo con los desembolsos recibidos en función del contrato por el valor aproximado de US$ 20 millones con recursos no contabilizados que se encontraron en cuentas offshore. Cuando Toledo dejó de ser presidente y ante el retraso de los pagos ilícitos por parte de Odebrecht, convocó a Barata a su casa de Camacho para presionarlo con la continuación de los pagos.
Otro proceso que afronta Toledo Manrique es el caso Ecoteva, en el que están incluidos la ex primera dama Eliane Karp, el fallecido empresario israelí Josef Maiman y el ex jefe de seguridad de Toledo, Avi Dan On. Todos son acusados por la Fiscalía por el delito de lavado de activos.
De acuerdo con la Fiscalía, Maiman creó una empresa offshore llamada Ecoteva Consulting Group para lavar dinero que estaba destinado a Alejandro Toledo. Con los fondos de esta empresa pagó la hipoteca de la casa del expresidente en Camacho y compró oficinas en Lima a nombre de Eva Fernenburg, madre de su esposa.
Se sospecha que se utilizó Ecoteva para lavar el dinero entregado por Odebrecht a Toledo.
Fuente: RPP