Hay pruebas de que China intenta influir en las elecciones estadounidenses, afirmó el viernes el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, tras reuniones clave en su visita de tres días a la nación asiática, en una entrevista con CNN.
“Hemos observado, en términos generales, evidencia de intentos de influir y posiblemente interferir [en las elecciones], y queremos asegurarnos de que eso se corte lo más rápido posible”, señaló Blinken.
“Cualquier interferencia de China en nuestras elecciones es algo que estamos analizando con mucho cuidado y es totalmente inaceptable para nosotros, así que quería asegurarme de que escuchen ese mensaje nuevamente”, reiteró.
EE.UU. está centrado en áreas de cooperación con Pekín, aseguró el secretario. “Pero también somos muy francos sobre nuestras diferencias y eso es importante si queremos evitar que la competencia en la que estamos se convierta en conflicto“, avisó.
Por su parte, el viernes, el presidente chino, Xi Jinping, señaló que los dos países deben ser “socios más que rivales”, buscar un terreno común pese a las diferencias y no “la competencia feroz”, al tiempo que deben cumplir su palabra.
En este sentido, Xi evocó tres principios –“respeto mutuo, coexistencia pacífica y cooperación en beneficio mutuo”– que no solo sean un resumen de la experiencia pasada, sino también una “guía para el futuro”.