La cárnica brasileña JBS ha logrado un beneficio neto de US$ 328,8 millones en el segundo trimestre del año, frente a pérdidas por importe de US$ 53,2 millones en el mismo trimestre del año anterior.
Según el informe de cuentas de la compañía, las ventas se incrementaron un 6,8% en términos interanuales, hasta alcanzar una cifra de negocio de US$ 19.284 millones. Por su parte, los costes se elevaron un 1,6%, hasta US$ 2.973 millones.
Por mercados, con la excepción de JBS Beef North America, que enfrenta un ciclo ganadero desafiante, todas las unidades de negocios mostraron una mejora en comparación con el mismo período del año pasado, destacando a Seara, Pilgrim’s y la unidad de carne porcina en Estados Unidos.
Si bien el entorno del mercado en los Estados Unidos sigue siendo desafiante, los negocios de carne vacuna en Brasil y Australia se están beneficiando de ciclos favorables en ambos países, según han explicado desde la empresa.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) ajustado se ha duplicado (incremento del 109,8%) en comparación con el segundo trimestre del año anterior, hasta US$ 1.894 millones.
La deuda neta de la compañía ha caído un 11,4% respecto al segundo trimestre del pasado año, y un 7% respecto al primer trimestre de este año, situándose en US$ 14.759 millones.
El consejero delegado de JBS, Gilberto Tomazoni, ha afirmado que la compañía tuvo un segundo trimestre “sólido”, lo que le permite defender su estrategia de diversificación y hacer “realidad” las prometedoras perspectivas para 2024.
“Los números del segundo trimestre refuerzan la solidez de nuestra gestión financiera. Nuestros resultados reafirman nuestra confianza en la estrategia a largo plazo de JBS. La fortaleza de nuestra diversificación coloca a JBS en una posición única en la industria”, ha resaltado.
