Las milicias kurdo-sirias Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), apoyadas por EE.UU., andan en la provincia de Al-Raqa.
Al menos cuatro miembros de las llamadas Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) han muerto en un ataque con misiles a su base en la provincia de Al-Raqa.
El ataque de origen desconocido, llevado a cabo con misiles antitanque guiados TOW, de fabricación estadounidense, tuvo lugar el sábado en la parte oriental de Al-Raqa (norte de Siria), y dejó cuatro muertos entre las filas de las milicias kurdo-sirias, apoyadas por Estados Unidos, según ha informado la agencia rusa de noticias Sputnik, citando a fuentes tribales de Al-Raqa.
El ataque, el primero de este tipo sufrido por las FDS, fue tan brutal que las milicias afiliadas a EE.UU. evacuaron por pánico el cuartel, agregaron las fuentes que hablaron bajo condición de anonimato.
Asimismo, las tropas estadounidenses desplegadas en Deir Ezzor (este) y sus aliadas FDS impusieron el sábado un toque de queda y un fuerte cordón militar en la localidad de Al-Basira, en el norte de esta provincia, horas después de que una de sus instalaciones sufriera un ataque armado llevado a cabo por miembros de tribus locales, agrega Sputnik.
Las Fuerzas Armadas de EE.UU. entrenan a la milicia kurdo-árabe Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) para brindar ataques aéreos en Siria, reza un informe.
Las fuentes agregaron que los militantes de las FDS lanzaron una campaña de redadas y arrestos en la aldea de Abriha cerca de Al-Basira, además de imponer una restricción de entrada y salida de civiles en esta localidad.
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Las fuentes señalaron que los francotiradores de las FDS amenazaron con apuntar a cualquier persona que abandonara su casa en Al-Basira.
Los ataques a bases y cuarteles de las fuerzas estadounidenses y sus aliados FDS han aumentado en Siria, debido entre otras razones, por las prácticas represivas de éstas en las áreas que controlan y el reclutamiento forzosos de los civiles en sus filas.
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EE.UU. mantiene tropas en Siria contra la voluntad de esta nación levantina en una gran parte en los campos petroleros de las zonas orientales.
A su vez, el Gobierno de Damasco acusa a Washington de saquear los recursos del país, además de pertrechar, entrenar, financiar y armar a las bandas terroristas, a fin de derrocar al legítimo Ejecutivo del presidente Bashar al-Asad, quien ha prometido una y otra vez arrebatar el país a los terroristas y expulsar a los invasores.
