Detrás del desplome del 8% en las acciones de Deutsche Bank, el pasado viernes; estuvo un pequeño movimiento de cinco millones de dólares en los CDS (siglas de Credit Default Swap) sobre la deuda subordinada del banco. Fue una gota en el océano, pero desató una liquidación masiva en bolsa, en un contexto de nerviosismo sobre el sector bancario. UBS había salido al rescate de Credit Suisse hace unos días. El BCE ha denunciado hoy que los CDS “pueden contaminar las acciones de un banco” y alentar “una salida de depósitos”.
Los CDS no dejan de actuar como cobertura ante posiciones abiertas en bolsa. Son seguros de impagos que cubren el riesgo de impago de un activo. Pero algunos inversores los utilizan para ponerse en corto. El precio de los CDS sube, si el activo al que están vinculados cae. De esta manera, comprar CDS es una manera fácil de contratar posiciones bajistas. Cotizan en mercados opacos y pocos líquidos, y multiplican la posición del inversor de forma apalancada.
Según Bloomberg es lo que ocurrió el pasado viernes, la compra de cinco millones de CDS subordinados a un año de Deutsche Bank, dispararon los seguros en el mercado por encima de 800 puntos básicos. La operación no encontró de forma rápida contra parte, lo que provocó un fuerte movimiento. La pequeña posición bajista desencadenó una liquidación de 1.600 millones en la capitalización del banco alemán en bolsa.
La noticia ha saltado justo cuando Andrea Enria, presidente del Consejo de Supervisión del BCE, denunciaba que la opacidad del mercado de CDS. “Con unos pocos millones se puede mover el diferencial de CDS de un banco con activos de un billón de euros y contaminar, por supuesto, los precios de las acciones y posiblemente también las salidas de depósitos”, explicaba hoy el banquero central en una conferencia en Frankfurt. “Es algo que me preocupaba mucho”.
Los CDS cotiza como si fueran acciones, o para ser más precisos, cotizan a la inversa respecto al activo principal, en mercados opacos de derivados y swaps financieros. “Es algo que me preocupaba mucho”, ha explicado Enria. “Son mercados muy opaco, muy poco profundo y muy poco líquido, y debería haber más transparencia”, ha incidido.
En un contexto de nerviosismo bancario, la poca liquidez de este mercado hizo que una sola operativa provocase un gran movimiento, que tuvo no solo consecuencias en la propia entidad alemana, sino también en el valor en bolsa del resto del sector y en los precios de los bonos. Quizá, esto, en otro contexto de mercado no hubiera tenido tales consecuencias, pero con los dos precedentes inmediatos del Silicon Valley Bank en EEUU y el Credit Suisse en terreno europeo, los inversores se encontraban advertidos por si cualquier otro banco era el siguiente en caer.
“Los inversores ven a Deutsche Bank como una de las entidades con mayor riesgo; por lo tanto, en caso de que desee apostar en general contra un sentimiento débil, este tipo de nombres pueden ser interesantes”, explica Suvi Platerink Kosonen, analista de crédito bancario de ING. Para que ponerse bajista contra todo un sector, cuando se puede ir contra la entidad más débil.
Deutsche Bank lleva desde hace tiempo el cártel de banco enfermo de Europa. Tiene en su balance una fuerte exposición a complejos derivados y una posición importante en hipotecas de oficinas y locales en EEUU.
Las acciones de Deutsche Bank llegaron a caer más del 14%, en otro día de pánico bancario, pero el jueves ya se había detonado el nerviosismo. Hubo otras compras que barrieron con los CDS senior a cinco años, subieron cerca de los 500 puntos básicos, un día antes.
En el mercado también hay CDS vinculados directamente sobre Deutsche Bank. El pasado viernes pasó de los 145 puntos a los 196, alcanzando un riesgo de impago del 15,9%, ante el miedo de ver al principal banco alemán como Silicon Valley Bank o rescatado in extremis como Credit Suisse.
Una vez que el propio banco ha explicado que no hay riesgo gracias a un porfolio bien diversificado de depósitos, el mercado se tranquilizó y no se vieron más subidas del CDS. Sus títulos recuperaron un 4,7% desde mínimos. No está claro quién está detrás de esta operación ni su motivación, pero según apuntan desde la agencia, fue con una motivación de cobertura.