La vulnerabilidad de alto riesgo detectada a finales del año pasado en China en el sistema de almacenamiento en la nube de Alibaba está ahora en el foco de atención de las autoridades estadounidenses.

Según informa en exclusiva la agencia Reuters, la Administración Biden está examinando a una subsidiaria del gigante chino del comercio electrónico, la empresa Alibaba Cloud Computing, para detectar si hay algún riesgo para la seguridad nacional de EE.UU. en su funcionamiento.

Tres personas informadas sobre el asunto indicaron a la agencia que se está investigando cómo la compañía almacena los datos de sus clientes estadounidenses, incluida la información personal y de propiedad intelectual, y si el Gobierno chino podría acceder a ellos. La posibilidad de que Pekín pueda suspender el acceso de los usuarios estadounidenses a su información almacenada en la nube de Alibaba es otro motivo de preocupación, dijo una de las fuentes.

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Los reguladores de EE.UU. podrían optar, en última instancia, por obligar a la empresa a tomar medidas para reducir los riesgos o prohibir por completo que los estadounidenses en el país y en el extranjero utilicen este servicio. Este posible escenario ya ha afectado negativamente a la cotización de las acciones de Alibaba en las bolsas norteamericanas.

Alibaba tenía grandes ambiciones para su negocio en la nube en suelo estadounidense hace varios años, antes de que agudizaran las tensiones entre las autoridades del país norteamericano y Pekín. El gigante del comercio se propuso competir con Amazon, Microsoft y Google y en 2015 puso en servicio en Silicon Valley un centro de computación en la nube, el primero fuera de China, y después creó otro centro de datos en Virginia. Sin embargo, las políticas de la Administración de Donald Trump hizo que la compañía fundada por Jack Ma revisara su estrategia para EE.UU., según las fuentes de Reuters.

Por su parte, los reguladores chinos suspendieron temporalmente en diciembre pasado su asociación con Alibaba Cloud Computing para someter a escrutinio una vulnerabilidad llamada ‘Log4Shell’ en la popular herramienta de registro de código abierto Apache Log4j, la cual fue detectada un mes antes por un trabajador del propio consorcio chino. El motivo aducido para la suspensión fue que la compañía no comunicó debidamente a las autoridades sobre el fallo tan pronto como fue encontrado.