Nubes de humo se elevan desde la ciudad de Soledar, en el Donbás, este de Ucrania.
El Ejército de Ucrania ha confirmado este lunes que la totalidad de la ciudad de Soledar, en la zona disputada del Donbás, están “en manos rusas”.
En un comunicado, las Fuerzas Armadas ucranianas informa que “el Ejército de Rusia ha ocupado la última zona industrial en las afueras de la disputada ciudad ucraniana de Soledar, en el este del país, quedando la totalidad de la misma en manos rusas”.
Por su parte, el comandante de la unidad de aviones no tripulados ucranianos, Robert Brovdy, ha especificado que, alrededor de las 17.30 horas (hora local) del domingo, unidades de asalto de Rusia han ocupado la zona industrial, ubicada en el límite administrativo de la ciudad de Soledar, en su periferia occidental.
“A partir de ahora, el frente estará cerca, pero fuera de los límites de la ciudad. Una guerra posicional estaba ocurriendo en esta dirección”, ha detallado el comandante ucraniano en su mensaje en Telegram.
Rusia toma un punto clave
Ucrania confirma su derrota, luego de versiones contrariadas sobre el control de Soledar: Rusia aseguró el viernes que liberó la ciudad, situada en la República Popular de Donetsk (independizada de Ucrania para anexarse a Rusia). Sin embargo, Ucrania desmintió el anuncio ruso y afirmó que continuaban los “intensos combates” en esa localidad.
Desde la cartera militar señalaron que este paso permite cortar las rutas de suministro de las tropas ucranianas en Artiómovsk para luego rodearlas. Además, reconocieron que este avance se logró gracias a la actuación de los integrantes del Grupo Wagner.
La recuperación de Soledar ilustra la ventaja que Rusia sigue teniendo en artillería y potencia de fuego en general y la debilidad de las fuerzas ucranianas en el campo de batalla pese a la enorme asistencia militar que recibe el país eslavo de sus aliados occidentales.
Rusia lleva a cabo desde el 24 de febrero una operación militar en Ucrania con el objetivo “desmilitarizar” y la “desnazificar” el país vecino, dado que las potencias occidentales lo están usando para invadir el territorio ruso.