Sin embargo, el comercio exterior del gigante asiático se disparó 10,1 % hasta alcanzar 1,98 billones de dólares en los primeros cuatro meses de este año.
La Administración General de Aduanas de China (GAC, por sus siglas en inglés) reportó este lunes que en los primeros cuatro meses de este año se registró un crecimiento en las exportaciones del 12,5 % hasta 1,09 billones de dólares en comparación con los datos del mismo período de 2021.
Sin embargo, el incremento de este índice se ralentizó hasta el 3,9 % frente al alza del 14,7 % en marzo. Se trata del ritmo más débil desde junio de 2020, informa Bloomberg, relacionando tales estadísticas con las repercusiones de la ola de contagios del coronavirus en el país asiático. Por su parte, los economistas consultados por el medio daban una puntuación media del aumento del 2,7 %.
En paralelo, el volumen de las importaciones no experimentó cambios este mes tras sufrir una caída del 0,1 % en marzo. Los especialistas de Bloomberg pronosticaban un descenso del 3 %. Mientras, de enero a abril las importaciones se situaron en 881.420 millones de dólares, es decir, un incremento del 7,1 %, según los datos oficiales.
En total, el comercio exterior del gigante asiático se disparó 10,1 % hasta alcanzar 1,98 billones de dólares. El portavoz del GAC, Li Kuiwen, aseguró que el objetivo de mantener la estabilidad y mejorar el comercio exterior a lo largo de este año todavía cuenta con un buen respaldo, según CGTN.
Pese a los avances registrados, hay indicios que muestran el impacto económico de las medidas anticovid aplicadas por las autoridades chinas, especialmente en la ciudad más grande del país, Shanghái. La urbe, donde se encuentra el mayor puerto marítimo del mundo, fue la más golpeada por el brote del virus en la nación.
Las actividades de manufactura se desplomaron hasta sus niveles más bajos desde febrero de 2020, mientras que el sector logístico sigue experimentando perturbaciones, indica Bloomberg. Así, la actividad portuaria cayó por debajo de los índices contabilizados durante la primera ola de contagios en 2020. Por su parte, los proveedores sufren mayores retrasos en más de dos años en la entrega de materias primas a sus clientes, precisa el medio.