Las Fuerzas Armadas de Indonesia y de EE.UU. participarán en los ejercicios militares conjuntos de mayor envergadura jamás realizados entre ambos países, informa BenarNews.
Las maniobras Garuda Shield 2021, que se prolongarán por espacio de dos semanas en las provincias indonesias de Sumatra Meridional, Borneo Oriental y Célebes Septentrional, están destinados a fortalecer las relaciones bilaterales entre Indonesia y EE.UU.
Según se precisa en un comunicado de la embajada de EE.UU. en Indonesia, en los ejercicios —que se desarrollarán entre el 4 y el 14 de agosto—, participarán aproximadamente 1.000 militares estadounidenses y 850 miembros del Ejército indonesio.
En la cuenta oficial en Facebook de Garuda Shield, se califican los entrenamientos militares de este año como “la mayor edición de los ejercicios jamás realizada” entre ambos países. Las maniobras, que se realizaron por primera vez en 2009, van encaminadas a “fortalecer y enriquecer las habilidades de guerra en la selva” de ambos ejércitos, según una publicación de la 2.ª Brigada de Infantería de Combate de la 25.ª División de infantería de EE.UU.
En particular, los militares de ambos países participarán en capacitación sobre el terreno, fuego real, ejercicios aéreos y actividades médicas.
“Con suerte, Garuda Shield creará futuros líderes del Ejército indonesio que sean profesionales y estén a la altura de los estándares internacionales”, aseveró el jefe de Estado Mayor del Ejército de Indonesia, Andika Perkasa.
La participación de EE.UU. en los ejercicios coincide con el intento de la Administración del país norteamericano de mejorar las relaciones con los países del Sudeste Asiático.
El pasado martes, el secretario de Defensa de EE.UU., Lloyd Austin, afirmó durante su visita a Singapur que había llegado al Sudeste Asiático “para estrechar los lazos con los aliados y los socios” de quienes depende la seguridad mutua.
Los ejercicios Garuda 2020 fueron cancelados el año pasado por la pandemia de covid-19, pero este año las maniobras se llevarán a cabo, a pesar de que el país asiático afronta actualmente una rápida propagación de la cepa Delta del coronavirus.