El primer ministro de Hungría, Víktor Orbán, ha declarado este martes en una reunión con el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, que el objetivo se su visita a Kiev es “entender” qué posibilidades de paz ve el Gobierno ucraniano.
“Estamos muy a favor de la paz. Me gustaría que entendieran que ésta es mi misión, comprender cómo ven las oportunidades de paz”, afirmó el líder húngaro en un vídeo del encuentro difundido por Zelenski en sus redes sociales.
“El objetivo de mi presencia aquí es entender cómo podemos ayudar a Ucrania en los próximos seis meses y también como podemos ayudar a la comunidad húngara,” señaló Orbán, en referencia a la asunción de Hungría de la presidencia rotatoria y semestral del Consejo de la Unión Europea.
Desde que Rusia lanzó la invasión de Ucrania en febrero de 2022, esta es la primera vez que el jefe del Gobierno magiar viaja al atacado país vecino, que sí fue anteriormente visitado por la ex presidenta Katalin Novák.
Las relaciones de los dos Gobiernos están cargadas de roces. Kiev ve en Budapest un aliado de Moscú, mientras que Hungría acusa a Ucrania de no respetar los derechos de la minorías étnicas que viven en su territorio, entre ellas la magiar, de unas 150.000 personas.
La visita de Orbán no se esperaba, ni fue anunciada previamente, aunque evidentemente ya estaba planeada, tal y como se desprende de unas crípticas declaraciones efectuadas la víspera por el primer ministro magiar en una entrevista con la televisión pública M1.
“Si mañana [este martes] se fijan en la prensa, verán cómo se dan los primeros pasos” hacia la paz, respondió Orbán a una pregunta sobre las posibilidades que tendría Hungría para lograr el fin de la guerra en Ucrania.
En este contexto, reiteró su convicción de que si el candidato republicano y expresidente Donald Trump gana las elecciones de noviembre en su país y vuelve a la Casa Blanca, impulsará una solución negociada al conflicto.
“El mayor problema de Europa actualmente es la guerra entre Ucrania y Rusia y el continente debe prepararse las negociaciones entre Moscú y Washington que empezarán tras la victoria electoral de Trump en Estados Unidos”, subrayó. “La mayor oportunidad para Hungría en su presidencia semestral es acercar a Europa a la paz”, dijo.
El conservador y ultranacionalista Gobierno de Hungría, país miembro de la UE y de la OTAN, se niega a entregar armas a Ucrania y pide negociaciones de paz. Orbán llegó a acusar de belicismo a los países occidentales y a la Comisión Europea por su apoyo militar y financiero a Kiev.