El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres.
En un nuevo informe sobre el PIAC, el secretario general de la ONU subraya que EE.UU. debe levantar sus sanciones contra Irán y las restricciones al petróleo.
“El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, sigue creyendo que el Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés) es la mejor opción disponible para garantizar que el programa nuclear de Irán es pacífico”, subrayó la jefa adjunta de Asuntos Políticos y de Consolidación de la Paz de las Naciones Unidas, Rosemary DiCarlo.
Al leer el informe número 16 del secretario general de la ONU sobre el acuerdo nuclear, conocido por las siglas de su nombre oficial PIAC, la funcionaria dijo que Guterres también insistió en que Estados Unidos debe levantar sus sanciones contra Irán y extender las exenciones con respecto al comercio de petróleo con la República Islámica de Irán.
Guterres mencionó también que, a pesar de las intensas inspecciones y el amplio seguimiento por parte de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), este órgano aún no puede verificar las reservas de uranio enriquecido en el país persa.
El acuerdo nuclear de Irán, oficialmente conocido como el Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés), está ahora, a todos los efectos prácticos, muerto. Al igual que en el legendario
También considera esencial que Irán dé marcha atrás en medidas que no son coherentes con sus compromisos relacionados con la energía nuclear en virtud del PIAC, tal como ha prometido que son “reversibles”.
Al respecto, Amir Said Irvani, representante de Irán ante las Naciones Unidas, recordó que es derecho de Irán reducir sus obligaciones cuando la contraparte no implementan el PIAC, como es el caso de Estados Unidos y los países europeos. Las medidas correctivas de Irán, agregó el funcionario persa, están autorizadas por las cláusulas 26 y 36 del acuerdo nuclear.
En 2015, Irán y seis países (Estados Unidos, Rusia, China, Francia, Alemania y Reino Unido) acordaron el levantamiento de numerosas sanciones sobre la economía iraní a cambio de una reducción autoimpuesta del programa nuclear con fines pacíficos de Teherán. Sin embargo, el PIAC quedó moribundo en 2018 con la retirada unilateral de EE.UU., bajo la presidencia de Donald Trump, y el restablecimiento de sanciones contra Irán.
Las partes iniciaron una serie de negociaciones para salvar el PIAC con la llegada al poder de la actual Administración estadounidense. Sin embargo, los esfuerzos diplomáticos multilaterales se estancaron, e Irán culpa de ello a Estados Unidos por no garantizar que no abandonará el acuerdo nuevamente.