Mediante un comunicado emitido este lunes, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Siria ha condenado en duros términos la ocupación turca y el persistente crimen de sus mercenarios de cortar el agua por más de dos meses en la ciudad de Al-Hasaka y sus alrededores.

En la nota, citada por la agencia siria oficial de noticias SANA, la aludida Cartera responsabiliza al Gobierno de Turquía, presidido por Recep Tayyip Erdogan, de las repercusiones de tal medida y, además, denuncia la actuación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) al respecto.

“El fracaso de la ONU y sus organizaciones para condenar las prácticas turcas puso en duda su credibilidad”, se lee en el texto.

De igual manera, ha apuntado a los presuntos defensores de los derechos humanos por ignorar este crimen, ya que pone de relieve sus verdaderas agendas y “doble rasero”.

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Ankara, que controla de forma ilegal y a través de los llamados grupos rebeldes vastas zonas en el norte de Siria, lleva varias semanas amenazando con lanzar una nueva ofensiva contra las milicias kurdas, la cuarta desde 2016.

Turquía alega que con sus operaciones busca crear una zona de seguridad de 30 kilómetros en la frontera que comparte con Siria.

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Damasco condena los ataques de Turquía y dice que la principal razón que impulsa a Ankara a escalar las tensiones en el norte del país es respaldar a los grupos terroristas en dichas zonas, por lo que exige la salida inmediata de los uniformados turcos de su territorio.

Fuente: Hispantv