El alcalde provincial de Huancavelica, Toribio Castro Cornejo, participó en la presentación del proyecto sobre resiliencia climática. Foto: ANDINA/Difusión. Un proyecto para proteger los derechos ecológicos de la población altoandina y fortalecer su resiliencia frente a los impactos del cambio climático fue presentado en la región Huancavelica.
El proyecto ‘Los distritos de Turpo y Huancavelica garantizan los derechos ecológicos y fortalecen la resiliencia climática de la población’ se presentó en un acto con asistencia del alcalde provincial de Huancavelica, Toribio Castro Cornejo, y diversos representantes de entidades públicas y privadas.
El burgomaestre recordó que “ya son evidentes” los estragos causados por el cambio climático, especialmente por la escasez de agua en Huancavelica, y observó que la única forma de revertir esta situación es “el trabajo conjunto entre ciudadanía, autoridades y la sociedad civil”.
Por su parte, el gerente general del Gobierno Regional de Huancavelica, Daniel Rodríguez, felicitó a la asociación Kusi Warma “por ser una de las primeras organizaciones en trabajar un proyecto de adaptación al cambio climático en Huancavelica”.
“¿Cómo nos vamos a adaptar al cambio climático?, ¿qué consecuencias tendrá? –preguntó Rodríguez–. Todo esto pasa por un tema ambiental, de recursos, de sensibilización y también pasa por cada uno de nosotros, que debemos poner nuestro grano de arena”.
El proyecto, que involucra un trabajo conjunto con actores de Huancavelica y Apurímac –comunidades campesinas, municipios, entidades públicas y privadas– es impulsado por Kusi Warma y tiene el apoyo de Kindernothilfe y el Ministerio Federal Alemán de Cooperación Económica y Desarrollo.
El proyecto “Los distritos de Turpo y Huancavelica garantizan los derechos ecológicos y fortalecen la resiliencia climática de la población” se desarrolla en dos regiones: Apurímac, provincia de Andahuaylas, distrito de Turpo, y Huancavelica, provincia y distrito de Huancavelica.
El período de ejecución del proyecto inició el 1 de noviembre de 2022 y se prolongará hasta el 30 de abril de 2026.
El proyecto busca que las comunidades de dichos distritos protejan y mantengan las fuentes de agua como parte de los ecosistemas naturales altoandinos.
Además, fortalece las capacidades de los comités de agua para riego en organización, operación y mantenimiento de los sistemas de agua, y apunta a que escolares, docentes, familias y miembros de la comunidad mejoren sus conocimientos sobre el uso responsable de los recursos hídricos.