La publicidad de la película “Las Uvas de la ira”, dirigida por John Ford y protagonizada por Henry Fonda, popularizó en los años 40 la foto de un destartalado camión que resumía la dramática trama del film, ambientada en el contexto de la grave depresión norteamericana de los años 30 en que, empujadas por el hambre, las familias viajaban por miles de kilómetros, rumbo a California, a bordo de ese camión para buscar pan, trabajo y esperanzas.
En el Perú de hoy, y como nuestra realidad supera la imaginación de cualquier cineasta de todos los tiempos, esta pintura de Alcides Catacora Pinazo, que está circulando en las redes sociales, perenniza la hermosa épica de los pobladores de Puno, Carabaya, Juli, Ilave, Juliaca, Azángaro, Putina, Huancané, Ayacucho, Cuzco, Apurímac, y otras regiones; que, en admirable ejemplo de resiliencia, y luego del profundo dolor de llorar y enterrar a su medio centenar de muertos por inmisericorde abaleamiento de parte del gobierno de Dina Boluarte; y desafiando el frio, el hambre, el calor, el implacable acoso policial, así como la seguridad de su propia vida, están dejando sus humildes hogares para enrumbar a Lima; pero esta vez EN BUSCA DEL PAN SUBLIME DE LA JUSTICIA Y LA DIGNIDAD.