Una embolia pulmonar es un bloqueo súbito de una arteria pulmonar. Puede ocurrir después de que un coágulo se desprenda y viaje por el torrente sanguíneo hacia los pulmones. La embolia pulmonar es un cuadro serio que puede causar:
- Daño permanente en los pulmones
- Bajos niveles de oxígeno en la sangre
- Lesiones en otros órganos del cuerpo por no recibir suficiente oxígeno
La embolia pulmonar puede ser potencialmente mortal, especialmente si un coágulo es grande o si hay muchos coágulos.
¿Qué causa una embolia pulmonar?
La causa suele ser un coágulo de sangre que se desprende y viaja por el torrente sanguíneo a los pulmones. El coágulo suele ser una trombosis venosa profunda, un coágulo en la pierna. En casos raros, burbujas de aire, fragmentos de grasa o partes de un tumor pueden bloquear la arteria pulmonar y causar embolia pulmonar.
¿Quién está en riesgo de tener una embolia pulmonar?
Cualquier persona puede tener una embolia pulmonar, pero ciertas cosas pueden aumentar su riesgo de sufrirla:
- Cirugías: Especialmente cirugía de reemplazo articular
- Afecciones médicas, incluyendo:
- Cánceres
- Enfermedades del corazón
- Enfermedades pulmonares
- Fractura de cadera o pierna o algún otro trauma
- Medicamentos hormonales: Como píldoras anticonceptivas o terapia de reemplazo hormonal
- Embarazo y parto: El riesgo es mayor unas seis semanas después del parto
- No moverse por mucho tiempo: Estar en reposo en cama, tener un yeso o tomar un vuelo largo en avión puede aumentar el riesgo
- Envejecimiento: Su riesgo aumenta a medida que envejece, especialmente después de los 40 años
- Historia familiar y genética: Ciertos cambios genéticos que pueden aumentar su riesgo de coágulos de sangre y embolia pulmonar
- Obesidad
¿Cuáles son los síntomas de una embolia pulmonar?
Los síntomas incluyen:
- Falta de aliento
- Respiración rápida
- Dolor o malestar de pecho que en general empeora al toser o respirar profundamente
- Aumento de la frecuencia cardíaca
- Toser sangre
- Presión arterial muy baja, mareos o desmayo
En ocasiones, las personas con embolia pulmonar no muestran síntomas hasta que presentan complicaciones graves, como hipertensión pulmonar (presión arterial alta en las arterias de los pulmones).
¿Cómo se diagnostica la embolia pulmonar?
Puede ser difícil diagnosticar la embolia pulmonar. Para hacer un diagnóstico, su proveedor de atención médica va a:
- Tomar en cuenta su historia clínica, incluyendo preguntas sobre sus síntomas y factores de riesgo de embolia pulmonar
- Hacer un examen físico
- Realizar algunas pruebas, incluyendo varias pruebas de imagen y posiblemente algunas pruebas de sangre
¿Cuáles son los tratamientos para una embolia pulmonar?
Si tiene embolia pulmonar, necesita tratamiento médico de inmediato. El objetivo del tratamiento es romper los coágulos y evitar que se formen nuevos coágulos. Las opciones de tratamiento incluyen medicamentos y procedimientos médicos.
Medicamentos
- Anticoagulantes: Evitan que los coágulos de sangre crezcan y evitan que se formen nuevos coágulos. Puede recibirlos como una inyección, una píldora o por vía intravenoso. Pueden causar sangrado, especialmente si está tomando otros medicamentos que también adelgazan la sangre, como la aspirina
- Trombolíticos: Son medicamentos que disuelven los coágulos de sangre. Puede tomarlos si tiene coágulos grandes que causan síntomas graves u otras complicaciones serias. Los trombolíticos pueden causar sangrado repentino, por lo que se usan si su embolia pulmonar es grave y puede poner en peligro su vida
Procedimientos médicos
- Trombólisis con asistencia por catéter: Utiliza un tubo flexible para llegar a un coágulo de sangre en el pulmón. Su proveedor de atención médica puede insertar una herramienta en el tubo para romper el coágulo o para administrar el medicamento a través del tubo. Por lo general, se utiliza anestesia para este procedimiento
- Filtro en la vena cava para personas que no pueden tomar anticoagulantes: Su proveedor de atención médica insertará un filtro al interior de una vena grande llamada vena cava. El filtro atrapa los coágulos de sangre antes de que lleguen a los pulmones, lo que evita la embolia pulmonar. Sin embargo, el filtro no previene la formación de nuevos coágulos de sangre
¿Se puede prevenir la embolia pulmonar?
La prevención de la formación de nuevos coágulos de sangre puede evitar la embolia pulmonar. La prevención puede incluir:
- Seguir tomando anticoagulantes: También es importante que se haga chequeos regulares con su médico, para verificar que la dosis de sus medicamentos esté funcionando para prevenir la formación de coágulos de sangre, pero que a la vez no cause sangrado
- Cambios en el estilo de vida saludable para el corazón: como una alimentación saludable para el corazón, ejercicio y, si fuma, dejar el tabaco
- Usar medias de compresión para prevenir la trombosis venosa profunda
- Mover las piernas cuando está sentado por mucho tiempo (como en viajes largos)
- Moverse tan pronto sea posible después de una cirugía o estar postrado en una cama