“No es personal, tan solo son negocios”, y es que cuando el dinero entra en juego son pocos los que se acuerdan de amistades o incluso de los lazos de sangre, y un hombre de negocios como es Donald Trump no va a dejar escapar la oportunidad de hacer dinero fácil.
Según informan desde The Wall Street Journal, X (conocida históricamente como Twitter) y empresa propiedad de Elon Musk, ha llegado a un acuerdo con Donald Trump tras la demanda que el presidente de los EEUU interpuso contra la compañía después de la suspensión de su perfil en dicha red social, por ser el “instigador” del asalto al capitolio.
Twitter no fue la única afectada por estas demandas, ya que Trump hizo lo mismo con Meta y YouTube que también vetaron los perfiles del presidente en estas plataformas. Los abogados del ahora presidente defendieron que estas apps habían violado sus de sus derechos de la Primera Enmienda.
Ahora, y a pesar de la estrecha y buena relación entre ambos magnates (o eso es lo que parece), la compañía de Musk ha llegado a un acuerdo para pagar alrededor de 10 millones de dólares como compensación a Trump y dar por zanjado este tema. La noticia viene poco después de que se conociera que Meta, compañía de Mark Zukcerberg, también había llegado a un acuerdo, pero en esta ocasión la cantidad abonada al presidente ascendía a los 25 millones de dólares.
Cabe destacar que la denuncia de Trump a Twitter se interpuso antes de la famosa y polémica compra de Musk de la red social, por lo que en ese momento el presidente quería sacarle el dinero a otra persona. Recordemos que se estima que el dueño de Tesla invirtió alrededor de 250 millones de dólares a lo largo de 2024 para la campaña presidencial de Trump, al igual que una de las primeras medidas como nuevo dueño de Twitter fue la reinstaurar la cuenta de este.
Si bien hay un claro favoritismo de Trump con Musk con respecto al resto de magnates tecnológicos, 10 millones son 10 millones. Este podría ser el segundo “encontronazo” entre ambos, después de que a Musk no le gustara que Trump invirtiera dinero público en un proyecto donde se encuentra su actual archienemigo, Sam Altman de Open AI.