El jefe del INPE explicó que “el aislamiento total no está permitido en el sistema carcelario”, por lo que sí podrían reunirse. En tanto, exministros de Estado explicaron a La República que una solicitud así de los exmandatarios podría ser atendible.
Aunque por el momento no estará permitido, la posibilidad de que los expresidentes Alberto Fujimori, Alejandro Toledo y Pedro Castillo puedan encontrarse dentro del penal de Barbadillo existe. Así lo dio a conocer el actual jefe del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), Federico Llaque, quien explicó que el Tribunal Constitucional ha sido claro respecto a que “el aislamiento total no está permitido en el sistema carcelario”, lo cual aplica para la situación de los tres exjefes de Estado recluidos en la Dirección de Operaciones Especiales (Diroes).
De acuerdo a lo explicado por el titular del INPE, por el momento se evitará que Castillo, Toledo y Fujimori se reúnan, pero dependerá de ellos el solicitar un eventual encuentro dentro de las instalaciones de Barbadillo, bajo un estricto protocolo de seguridad. “Podríamos evitarlo, finalmente va a depender si ellos decidieran encontrarse. Pero por ahora la disposición es que no se encuentren, porque también el aislamiento total no está permitido en el sistema carcelario. El TC ya se ha pronunciado al respecto”, declaró Llaque a RPP.
En tanto, La República conversó con el exministro del Interior Wilfredo Pedraza, quien confirmó que los tres expresidentes están facultados a encontrarse y dialogar dentro del centro de reclusión: “Sí, es posible. De hecho, está prohibido el aislamiento de hecho o derecho, salvo sanción disciplinaria y por breve tiempo. Entonces, sí pueden verse y compartir espacios”.
Aclaró que, además del eventual pedido que pueda existir de parte de alguno de los expresidentes, también dependerá de “la propia circunstancia de la administración”. Es más, contó a este medio que el exmandatario Ollanta Humala Tasso sí tuvo un par de encuentros con Alberto Fujimori durante su estancia en el penal de Barbadillo, cuando cumplió una prisión preventiva durante los años 2017 y 2018 como investigado por presuntamente haber recibido el pago de coimas de la empresa brasileña Odebrecht. Actualmente, está en condición de investigado en libertad.
Por su parte, en mayo del 2020, el Tribunal Constitucional declaró la existencia de un estado de cosas inconstitucional sobre las condiciones de los internos en las cárceles. Dispuso que la administración penitenciaria “tiene la obligación de responder las solicitudes de los internos, realizar todos aquellos actos que sean necesarios para evaluar el contenido de lo solicitado y expresar el pronunciamiento correspondiente, el mismo que contendrá los motivos por los que se acuerda acceder o no a lo peticionado”.
Por su parte, el exministro de Justicia y Derechos Humanos, Gustavo Adrianzén, señaló a La República que dada la historia política de los expresidentes Alejandro Toledo y Alberto Fujimori, sería extraño ver solicitudes para que se visiten en Barbadillo. Aunque coincidió con el Tribunal Constitución y su postura sobre el aislamiento total de los reos: “Coincido con el TC. Lo que se podría hacer es darles horas de patio diferenciadas”.
Dado esto, un eventual pedido de los expresidentes Alejandro Toledo, Pedro Castillo y Alberto Fujimori tendría que ser tramitado por la administración del penal de Barbadillo. Por lo pronto, tanto el padre de Keiko Fujimori como Castillo Terrones ya cuentan con un régimen de visitas establecido para personas en libertad. El exlíder de Perú Posible podrá recibir hasta cinco visitas por cada fecha.
Las condiciones carcelarias de Alejandro Toledo
En cuanto a su situación penitenciaria, el jefe del INPE, Federico Llaque, informó que la celda del expresidente Alejandro Toledo cuenta con dos ambientes, un dormitorio, un baño, una ducha y un patio o jardín que podrá ser utilizado por el interno para salir a caminar durante el día.
Finalmente, Toledo Manrique es investigación por los presuntos delitos de colusión, tráfico de influencias y lavado de activos por, de acuerdo a la tesis fiscal, haber recibido coimas de Odebrecht para favorecer a la empresa brasileña durante el proceso de licitación de los tramos II y III de la carretera Interoceánica.
Fuente: La República