Difícil semana para el Gobierno afgano. Este domingo, decidió retirar a su personal diplomático en Islamabad, después de que la hija de su embajador fuera brevemente secuestrada y torturada. Pakistán negó los hechos y culpó más bien a los servicios de inteligencia de India. Mientras que los diálogos iniciados en Qatar junto al movimiento talibán concluyeron sin progresos significativos y sin el esperado cese al fuego.
El pasado viernes, la hija del embajador afgano en Pakistán caminaba por el centro de Islamabad, cuando fue asaltada cerca de su domicilio por un grupo de hombres que la secuestraron unas horas y la torturaron.
Silsila, de 26 años, fue liberada ese mismo día, aunque con heridas y marcas de cuerdas en su cuerpo. Hoy por hoy, permanece hospitalizada con pronóstico favorable.
Por este hecho, el Gobierno de Afganistán decidió este domingo retirar a todo su personal diplomático de la capital pakistaní, incluido a su embajador, Nabibulá Alijil. Hasta que Pakistán no investigue quién o quiénes son los autores del asalto y se aplique un castigo, todo el equipo se quedará en Kabul, según el Ejecutivo.
“El Gobierno (de Afganistán) llamó al embajador y a los diplomáticos de alto nivel a Kabul hasta la completa eliminación de las amenazas a la seguridad, incluido el arresto y castigo de los perpetradores”, comunicó el ministerio de Relaciones Exteriores afgano.
48 horas para encontrar a los asaltantes
El viernes, el Gobierno de Pakistán respondió a lo sucedido con la hija del embajador afgano, mientras que el sábado ordenó al ministerio del Interior encontrar a los responsables del incidente en un plazo de 48 horas.
Fue el primer ministro pakistaní Imran Khan quien asignó la máxima prioridad al asunto, afirmando que desea que se capture a los culpables.
Mientras que la investigación está en curso, el ministro del Interior pakistaní, Sheij Rashid, negó que la mujer hubiera sido secuestrada –a pesar de haber sido asaltada por desconocidos– y más bien dijo que se trató de un plan conspirativo organizado por los servicios secretos de India que buscarían “difamar” a Pakistán.
“No ha habido secuestro. Quiero decirle al país entero que es un ‘chanchullo’ internacional, una conspiración internacional, es cosa de la RAW (Ala de Investigación y Análisis indio)”, denunció Rashid en una entrevista televisiva.
Pakistán, clave en las negociaciones con los talibanes
Esta nueva tensión diplomática no cae en un buen momento, ya que este fin de semana el Gobierno afgano prosiguió en Doha (Qatar) los diálogos con los representantes del grupo insurgente talibán, justo cuando está aconteciendo una gran ofensiva del grupo sobre el terreno. Y Pakistán es justamente considerado un actor clave de todo este proceso.
A pesar de ayudar a llevar al grupo a la mesa de negociaciones, los encuentros no han logrado avanzar como se esperaba y, a esto se suma el repunte de la violencia y las ofensivas de los talibanes que han aumentado este 2021, sobre todo tras el anuncio de Estados Unidos de retirar sus tropas antes del 11 de septiembre.
Después de estar reunidos dos días en la capital qatarí las delegaciones de ambas partes se comprometieron a evitar víctimas civiles, proteger las infraestructuras y cooperar en la distribución de la ayuda humanitaria.
“Las dos partes se comprometieron a continuar con las negociaciones a un alto nivel hasta que se llegue a un acuerdo”, afirmaron en un comunicado al fin de la segunda jornada. Sin embargo, no se mencionó en ninguna parte pactar un alto el fuego en Afganistán, tal y como se esperaba.
Con EFE, Reuters y medios