Las bolsas mundiales se aferraran el viernes a sus modestas ganancias, tranquilizadas por la perspectiva de una apertura estable en Wall Street, aunque las preocupaciones sobre las finanzas del Gobierno de Estados Unidos limitaban el apetito de los inversores por el riesgo.
Los precios del crudo borraban las pérdidas iniciales, ya que las señales de un déficit en la oferta contrarrestaban las preocupaciones sobre la demanda de combustible en Estados Unidos y China.
El dólar avanzaba, en camino a su mayor alza semanal desde febrero, entre apuestas de los inversores de que la desaceleración de la economía estadounidense llevará a la Reserva Federal a hacer una pausa en la subida de las tasas de interés.
El índice de acciones mundiales de MSCI operaba plano y con escasas variaciones en la semana, aunque acumula un avance del 7% en el año.
Los futuros del Nasdaq y los del S&P 500 se mostraban más firmes, con una mejora del 1,5% de Tesla (NASDAQ:TSLA) Inc en las operaciones previas a la apertura de la sesión, ya que el fabricante de autos eléctricos subió los precios de algunos modelos en Estados Unidos y su jefe, Elon Musk, dijo que encontró una nueva presidenta ejecutiva para Twitter (NYSE:TWTR).
El índice paneuropeo STOXX 600 ganaba un 0,4%, acumulando un leve alza en la semana impulsado por las acciones de Richemont (SIX:CFR), que alcanzaron un máximo histórico al conocerse la fuerte demanda en la región de Asia-Pacífico.
La economía británica creció en los tres primeros meses del año -en lugar de la recesión que se pronosticaba a fines de 2022-, pero la recuperación sigue siendo frágil.
Los analistas señalan que los inversores están buscando nuevas razones para sacar a los mercados de sus rangos, ya que la temporada de resultados, en general positiva, está llegando a su fin y faltan pocas semanas para las próximas reuniones de los principales bancos centrales para fijar las tasas de interés.
“Hemos tenido un mercado agresivamente lateral y la gente está buscando algo que le dé dirección”, dijo Mark Tinker, de Toscafund Asset Management en Hong Kong.
La recuperación económica de China parece estar perdiendo fuelle: los nuevos préstamos bancarios cayeron en abril, los precios al consumo aumentaron al ritmo más lento en más de dos años y las importaciones se contrajeron de forma inesperada, lo que provocó un desplome de los precios de las materias primas, desde el cobre y el mineral de hierro hasta el petróleo.
Las acciones destacadas chinas cayeron un 1,3%, con un declive semanal del 1,7%, mientras que las acciones de Hong Kong cedieron un 0,5%. El índice más amplio de MSCI de acciones de Asia-Pacífico excluyendo Japón restaba un 0,6%, en camino a un descenso semanal del 1,2%.
Por su parte, el Nikkei japonés subió un 0,9%, hasta su nivel más alto desde noviembre de 2021, ya que los inversores celebraron los anuncios de mayores beneficios para los accionistas durante la temporada de resultados.
El dólar se beneficiaba de los flujos de refugio y se apreciaba frente a una cesta de seis destacadas monedas en medio de las preocupaciones por el crecimiento y los problemas bancarios. El euro cedía un 0,2%, a 1,089 dólares, y la libra esterlina avanzaba levemente a 1,2527 dólares.
El rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense subía, con el de los bonos referenciales a 10 años en el 3,4177% y el de las notas a dos años en el 3,9140%.
Los futuros del crudo avanzaban levemente y el precio del oro bajaba un 0,6%, a 2.004 dólares la onza.