15 meses después del inicio de la guerra en Ucrania, el Consejo de Seguridad de la ONU se reunió para abordar las consecuencias de las hostilidades en este país. Según las Naciones Unidas, el conflicto armado ha dejado unos 9 mil civiles muertos y otros 15 mil heridos. Durante el encuentro, Rusia denunció el envío masivo de armas a Kiev.
Según el diplomático ruso, Vasily Nebenzya, el envío del material bélico busca alargar la guerra en un intento para debilitar a Moscú.
A su vez, el representante chino ante la ONU, Geng Shuang, advirtió de los impactos de las bombas para una construcción posguerra.
Este fin de semana, los países miembros del G7 tienen previsto aprobar una nueva ronda de sanciones económicas contra Rusia en medio de la cumbre de líderes de Hiroshima en Japón, en la que participará de forma telemática el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski.