El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
Rusia denuncia que los países occidentales están librando una “guerra en todos los frentes” en su contra y llama a defender los intereses del país.
“La guerra se está librando en un sentido más amplio. Se está librando una guerra contra nosotros en todos los frentes, ya sea en la economía, las relaciones internacionales o en términos de propiedad”, ha alertado este domingo el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, en una entrevista con el canal de televisión Rossiya 1.
El funcionario ruso ha señalado que los cimientos, otrora intocables, “están colapsando bajo los pies del Occidente colectivo que no desdeña nada ahora”.
Ante esta coyuntura, el funcionario ruso ha instado a Rusia a no sucumbir a las emociones y mantener la mente sobria. “Debemos mantenernos enfocados y fuertes, y hacer […] lo que mejor se adapte a nuestros intereses, ser duros, pero abiertos a lo que pueda ayudarnos a comunicar claramente nuestras preocupaciones”, ha enfatizado.
En cuanto al conflicto de Ucrania, Peskov ha asegurado que Rusia continuará su operación militar en este país hasta alcanzar los objetivos determinados por el presidente ruso, Vladímir Putin, respondiendo así a la pregunta de si Rusia cuenta con las fuerzas y los recursos necesarios para llevar a un fin lo que empezó en Ucrania.
La Cancillería rusa ha convocado al embajador de Washington en protesta por la posición de Estados Unidos sobre el ataque en su territorio.
De hecho, Putin dijo en su día que el objetivo de la operación fue proteger a la población rusoparlante y realizar la “desmilitarización” y “desnazificación” de Ucrania para impedir que se convirtiera en una amenaza para Rusia.
Moscú acusa a Occidente de querer prolongar el conflicto en Ucrania tanto como sea posible y hacerlo aún más sangriento, a pesar de las consecuencias catastróficas para el país y sus habitantes.
En el aniversario 77 del Día de la Victoria sobre el nazismo en la Segunda Guerra Mundial, Putin sostuvo el 9 de mayo que para Rusia “no hay pueblos hostiles ni en Occidente ni en Oriente”, señalando, no obstante, que su país es el objetivo de una supuesta conspiración de la rusofobia internacional.
