Candidato a la Presidencia de Guatemala Bernardo Arévalo del partido de izquierda Semilla, 26 de junio de 2023. Foto: Reuters
Bernardo Arévalo, candidato presidencial de izquierda en las elecciones de Guatemala, ha llamado a defender la voluntad popular expresada en las urnas.
De acuerdo con los resultados de los comicios del 25 de junio, Arévalo, candidato presidencial por el partido Movimiento Semilla, resultó segundo y debía medirse en balotaje con la ex primera dama Sandra Torres, de la Unión Nacional por la Esperanza (UNE, conservadora), pero, a pedido de la derecha, la justicia electoral ordenó que los resultados se revisen, lo que está en proceso desde el martes en medio de polémicas.
Este miércoles, en declaraciones a medios locales, Arévalo resaltó la necesidad de “defender el voto, lograr que se respete la expresión del pueblo que se logró en las urnas este 25 de junio”.
“Hago un llamado a estar muy atentos a todas las argucias legales, que están violando las leyes, pero como se hacen desde instituciones legales, están confundiendo a la población”, declaró a la emisora Radio Punto.
“Los partidos que perdieron la primera vuelta electoral en Guatemala intentan sabotear el recuento de votos para desprestigiar la victoria de Bernardo Arévalo”, según activista.
En un contacto con la Radio Francia Internacional, el candidato izquierdista denunció que los partidos que solicitaron el cotejo de las actas electorales son “los partidos que forman parte de esa misma clase política corrupta que desde hace 20 años se ha constituido por medio de las elecciones”.
“Nosotros llegamos en segundo lugar, pero pasamos al balotaje y esto, constituye una sorpresa para la que ellos no estaban preparados y que los hace ver que claramente todo este entramado de corrupción está en riesgo porque pierden todo ante un gobierno que no controlan y que no van a poder controlar”, subrayó.
El pasado fin de semana, y a partir del reclamo de varios partidos, la Corte Constitucional (CC) determinó que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) no podría oficializar los resultados de las elecciones sin antes revisar de nuevo los datos.
Sin embargo, la Misión de Observación Electoral de la Organización de los Estados Americanos (OEA) informó en un comunicado que las impugnaciones de las elecciones fueron bastante bajas, por lo que a su consideración no existen razones para pensar en irregularidades que motivaran esta audiencia.