El dólar australiano caía con fuerza el martes, después de que el Banco de la Reserva de Australia mantuviera sin cambios las tasas de interés, mientras que el yen tocaba mínimos de tres semanas, ya que las medidas adoptadas la semana pasada por el Banco de Japón para modificar su política de control de la curva de rendimientos seguían pesando sobre la divisa.
El dólar australiano se encaminaba a su mayor caída diaria en un mes después de que el banco central mantuviera el martes las tasas en el 4,1% por segundo mes consecutivo, afirmando que las alzas previas estaban enfriando la demanda, pero que podría ser necesario un endurecimiento monetario adicional para frenar la inflación.
La divisa oceánica perdía un 1,4%, a 0,6626 dólares, borrando las ganancias del 0,87% registradas en julio y registrando su mayor desplome diario desde marzo.
El yen restaba un 0,5% frente a su par estadounidense, a 142,97 unidades, a su peor nivel en tres semanas.
La divisa asiática ha estado en una carrera desenfrenada desde el viernes, cuando el Banco de Japón (BoJ) inició lo que podría convertirse en un lento alejamiento de décadas de un enorme estímulo monetario, diciendo que ofrecería comprar bonos del gobierno japonés a 10 años al 1% en operaciones a tasa fija en lugar del tipo anterior del 0,5%.
“Los mercados podrían poner a prueba lo ‘flexible’ que será el BoJ en los próximos meses”, dijo Carlos Casanova, de UBP en Hong Kong, añadiendo que los sutiles cambios sugieren que la entidad podría estar preparándose para modificar el objetivo de su control de la curva de rendimiento de sus bonos en 2023.
El índice dólar ganaba un 0,3%, a un máximo de tres semanas de 102,19 unidades, en medio de señales de debilidad en la actividad económica asiática.
El euro restaba un 0,2%, a 1,0975 dólares, cerca del mínimo de casi tres semanas alcanzado el viernes, y la libra esterlina caía un 0,4%, a 1,2785 dólares, tras nuevas señales de debilidad de la economía británica.