Exportaciones generarán un récord de US$50 mil millones este año: ¿Será sostenible este ‘boom’?

Pese a todas las crisis que ha provocado el coronavirus en el Perú, este será considerado un año extraordinario para el comercio exterior que genera nuestro país. Un 2021 sui generis, debido a sus fantásticas cifras, más propias de una economía de bonanza que de los tiempos actuales.

Por supuesto, los resultados del primer semestre y las optimistas proyecciones para fin de año en este sector tienen una explicación muy razonable, que enseguida detallaremos. Vivimos estos meses un ‘boom’ de esta actividad aquí, una explosión que sólo entre enero y junio le ha dejado ingresos al Perú por US$24.345 millones, según la Sociedad de Comercio Exterior (Comex). Ese registro implica un crecimiento de 47% respecto de lo obtenido en el mismo período del 2020, y deja ver un avance que el flamante ministro de Comercio Exterior y Turismo, Roberto Sánchez, ha calificado como un ‘récord histórico’.

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¿Cómo se consigue algo así en un contexto en el que aún se noticia sobre el cierre de fronteras, igual que en el ‘pandémico’ 2020? Y, sobre todo, ¿qué tan sostenible es este ‘impulso exportador’ de cara al 2022 y los próximos años?

Para Jessica Luna, gerenta general de Comex, si uno disgrega la actividad exportadora en sus dos grandes columnas, las exportaciones tradicionales y las no tradicionales, comenzará a identificar los ‘disparadores’ del famoso récord.

“En el caso de las exportaciones tradicionales, por ejemplo, el gran impulso ha venido por el lado de las exportaciones mineras, que entre enero y junio de este año han generado el 86,3% del rubro tradicional, con US$14.861 millones facturados”, precisa la ejecutiva. Ello, apalancado por el ‘superciclo’ de los precios del cobre y otros minerales, en un entorno en el que los mercado del mundo demandan materias primas para apuntalar su digitalización.

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Luego, añade Luna, han aportado también las exportaciones pesqueras tradicionales (con el 7,7% del total), y las del petróleo y sus derivados (5,3%).

Por el lado de las exportaciones no tradicionales, en cambio, ha sido el sector agropecuario el que ha empujado la aguja hacia arriba, con el 46,4% del total comercializado entre enero y junio, facturando US$3.300 millones.

Pero aquí vale la pena detenernos un instante para describir la ‘ventana de oportunidad’ que tiene el Perú en el corto plazo, como sugiere la titular de Comex, debido a que los productos mejor rankeados del sector agroexportador –la uva, los arándanos y la palta– se cosechan y exportan mayoritariamente en el segundo semestre del año, por lo que su aporte ‘más gravitante’ aún está por verse.

Sobre esto ya nos había hecho énfasis, a finales de julio, la presidenta ejecutiva de Prom-Perú, Amora Carbajal. En diálogo con Día1, nos comentó que una gran oportunidad para el mercado exportador, tal y como ocurre con el ‘superciclo’ de los metales, radica en la creciente demanda internacional por los llamados ‘superfoods’, en un contexto de pandemia en que los compradores globales requieren alimentos cada vez más saludables y con un mayor contenido nutricional, algo que le cae como anillo al dedo al Perú.

Un ‘boom’ sostenible

Lo dicho nos da pie para analizar qué tan sostenible es este ‘boom’ exportador con miras a los próximos meses y, más a mediano plazo, rumbo al 2022 y 2023.

La primera proyección en ese sentido la dio en junio Claudia Cornejo, ex cabeza del Mincetur, poco antes de hacer entrega de su cargo. Para la entonces funcionaria, en diciembre de este año el comercio exterior generado por nuestro país recuperaría sus índice prepandemia en su totalidad. ¿Eso es posible?

Jessica Luna considera que ello no es sólo factible sino que, este 2021, el sector anotará ingresos por alrededor de US$50 mil millones, lo cual es un ‘récord histórico’ en un horizonte de varios años atrás. ¿Y qué hay del 2022 y 2023?

“Primero, hay que asegurarnos de que podamos responder a la demanda de los mercados internacionales, y eso depende, entre otros factores, de un avance más rápido de la vacunación en nuestro país, pues nuevas olas de contagio pueden limitar nuestra capacidad productiva y, por ende, nuestras ventas al exterior”, acota a nuestro suplemento Juan Carlos Ladines, profesor de Negocios Internacionales de la Universidad del Pacífico (UP). Si ello no se consigue, puede haber un ‘descalce’ en el circuito exportador que terminaría mellando el ‘boom’, nos explica.

En favor de la demanda, por lo pronto, hay un par de aspectos a destacar, precisan en Comex.

El primero es la pronta vigencia del Tratado Integral y Progresista de la Asociación Transpacífico (CPTPP), que debe ejecutarse desde la quincena de setiembre, y que asegura el ingreso de nuestros productos, de forma inmediata y sin aranceles, a mercados como Nueva Zelanda y Vietnam, además de nuestra interacción con las otras economías que son parte del convenio, por supuesto, entre las que se cuentan a Australia, Brunéi, Canadá, Chile, Japón, Malasia, México y Singapur.

El segundo aspecto a tomar en cuenta es la firma de nuevos tratados de libre comercio, como el recientemente sellado TLC con el Reino Unido.

“Tenemos un TLC pendiente con India, por ejemplo. Las negociaciones se han ralentizado un poco debido a la pandemia, pero es un acuerdo muy relevante que deberíamos concretar”, refiere Luna.

Las agroexportaciones serían un excelente canal de acceso al mercado indio, concretamente en el caso de las frutas, que ya se envían a ese país, aunque en números todavía poco relevantes. Productos como la uva y los cítricos –mandarinas, naranjas, limones y toronjas– podrían abrirse un espacio y destacar, siempre que cumplan con todos los requisitos fitosanitarios, ha referido la consultora Fresh Fruit.

Descentralización, al fin

Hay, finalmente, un tercer ítem extra, pero muy relevante, al hablar de garantizar la sostenibilidad del ‘boom’ exportador peruano. Y este es el fomento de la descentralización productiva, algo que, con bemoles, se viene dando e incrementando, como ha destacado el Mincetur.

De hecho, sólo este año, 18 de nuestras 25 regiones han reportado crecimientos valiosos en sus exportaciones, que en más de un caso han sido, también, ‘récords históricos’, como el promedio nacional.

Ese ha sido el caso, por ejemplo, de Huancavelica (+147%), Apurímac (+137%), Puno (+112%), Amazonas (+107%) y Ucayali (+98%), por citar a las cinco primeras.

Si se mira a mediano y largo plazo, entonces, no sería descabellado pensar en clústeres regionales especializados en determinados rubros del comercio exterior, y conectados cada uno directamente con sus compradores en el extranjero. Esta, anotan los expertos, sería una forma muy efectiva de descentralizar los beneficios del crecimiento económico, hoy tan discutidos.

Bonus track: el valor de la promoción en los mercados globales

Como se ha dicho en este informe, así como el ‘superciclo’ del precio de los minerales ha impulsado este año las exportaciones tradicionales, en el caso de las no tradicionales un factor decisivo ha sido la creciente demanda internacional por los ‘superfoods’, es decir, por alimentos naturales y con alto contenido nutricional y que, precisamente por eso, son más costosos y generan mayor rentabilidad.

Nuestro país tiene una oferta muy potente en el rubro de ‘superfoods’ y, en esa misma línea, ha tratado de posicionarse, también, como un proveedor de productos de lujo en los mercados globales, como –en julio– comentó a Día1 Amora Carbajal, presidenta ejecutiva de Prom-Perú.

Vive la experiencia

Es así que, bajo el paraguas de la Marca Perú, en estos meses se han estado lanzando campañas como ‘Pisco, spirit of Perú’, o ‘Coffees from Perú’, en Norteamérica y Europa, al mismo tiempo que se preparan otras que destaquen, por citar un caso, nuestro premiados chocolates peruanos, han señalado desde la entidad promotora.

Lo mismo ha ocurrido y ocurre, con la promoción de nuestros textiles, como es el caso de la ‘Alpaca del Perú’, entre otros.

El caso es que hay un sinfín de oportunidades, refiere Jessica Luna, gerenta general de Comex.

“Tenemos a la trucha altoandina y sus exportaciones a países como Japón o Canadá; o las opciones que podría tener el paiche amazónico”, anota. Hay caminos por recorrer.