El mayor banco de Suiza, UBS (SIX:UBSG), publica mañana jueves sus resultados financieros del trimestre abril-junio, primeros tras su completa absorción de Credit Suisse (SIX:CSGN) y ante los que hay gran expectación, ya que se prevé que arrojen datos sobre el impacto de la operación o sus consecuencias para la plantilla.
Se espera que los resultados, cuya publicación se ha retrasado un mes debido a la complejidad de la absorción (culminada en junio), vayan acompañados de anuncios sobre futuras estrategias de UBS para hacer frente a su nueva realidad como gran gigante bancario suizo en solitario, obligado en marzo a absorber a su principal rival nacional para salvarlo de la quiebra.
Una de las grandes dudas que podría despejarse mañana es si UBS mantendrá la marca “Credit Suisse”, aún presente pese a la absorción. Los analistas consideran que el consejero delegado Sergio Ermotti es partidario de abandonarla, pese a su larga tradición de más de 160 años en las finanzas helvéticas.
Estos observadores sostienen que después de que el 11 de agosto UBS anunciara por sorpresa que renunciaba a las garantías de ayuda pública suiza acordadas por la compra de Credit Suisse, Ermotti, menos atado a los contribuyentes suizos, tendrá más libertad para tomar esta y otras medidas quizá impopulares.
En este punto entra también la cuestión de la reducción de plantilla: tras la absorción, UBS y Credit Suisse suman más de 120.000 empleados, y los medios económicos calculan que el banco quiere reducirla en hasta 35.000 trabajadores, en su mayoría de la segunda entidad, que aún mantenía a 48.000 a mediados de 2023.
De ellos, 10.000 podrían perder su empleo en la propia Suiza, lo que convierte la cuestión en un asunto de importancia nacional y objeto de grandes debates políticos en un país que afronta elecciones federales en octubre.
En cuanto a cifras, las predicciones de los analistas apuntan a que UBS podría publicar unos beneficios en el segundo trimestre de hasta 30.000 millones de euros (33.000 millones de dólares), una cifra astronómica derivada de la llegada de los activos de Credit Suisse.
En todo 2022, UBS reportó únicamente 7.000 milones de euros (7.630 millones de dólares) en beneficios.
En su informe de resultados UBS podría por otro lado, después de haber accedido a información más completa de las cuentas de Credit Suisse, dar detalles más amplios sobre la mala situación de la entidad absorbida.
Entre otras cosas, podría ofrecer cifras sobre los activos más “tóxicos” de Credit Suisse después de años de mala gestión en ese banco, e indicar estrategias para lidiar con ellos.