Decenas de miles de personas que acudían al festival ‘Burning Man’, celebrado en el noroeste del estado estadounidense de Nevada, han quedado atrapados en el desierto como consecuencia de las fuertes lluvias que han caído durante la noche y que han provocado inundaciones en la zona.
En torno a las 10:45 horas (hora local) del sábado, los organizadores del evento comunicaron que las puertas y el aeropuerto de entrada y salida de Black Rock City -la metrópolis temporal que aparece cada año en el desierto- permanecerían cerrados y dieron a los asistentes la orden de dosificar agua, comida y combustible y de buscar cobijo.
“La entrada y la salida están detenidas. No se permite conducir hasta que la superficie de la playa se seque, a excepción de los vehículos de emergencia”, han explicado los responsables en la red social X, antes conocida como Twitter. “Se anima a los participantes a conservar alimentos, agua y combustible, y a refugiarse en un espacio cálido y seguro”, añadían.
La Policía del condado de Pershing ha confirmado ya que investigan una muerte ocurrida durante el temporal, sin especificar las circunstancias de este fallecimiento, informa la cadena CNN