El dólar subía el lunes ante la perspectiva de que las tasas de interés estadounidenses se mantengan más altas por más tiempo, mientras que el yen se acercó a las 150 unidades por billete verde y se situaba cerca de su mínimo en un año, lo que ponía a los operadores en guardia ante la posibilidad de una intervención de las autoridades japonesas.
El yen bajaba a 149,83 por dólar, un mínimo en más de 11 meses, acercándose cada vez más a la marca de 150 que, según algunos operadores, podría provocar una intervención de Tokio en apoyo de la divisa.
“Para que el yen cambie de rumbo de forma sostenible, el Banco de Japón debe abandonar su política monetaria tan laxa”, dijo Dane Cekov, estratega de divisas de Nordea (ST:NDASE). “Si el yen rompe los 150 por dólar, lo que me parece probable, y la intervención verbal no va seguida de medidas, entonces podríamos ver un dólar/yen a 155”.
Un resumen de las opiniones de la reunión de septiembre del Banco de Japón, publicado el lunes, mostró que las autoridades monetarias debatieron varios factores que deben tenerse en cuenta al abandonar la política ultra laxa, mientras que el ministro de Finanzas, Shunichi Suzuki, dijo que estaban observando de cerca los movimientos de las divisas con un “fuerte sentido de urgencia”.
Mientras, la libra bajaba un 0,4% a 1,2158 dólares, tras haber caído casi un 4% frente al dólar en el tercer trimestre.
El euro cedía un 0,4% a 1,0535 dólares, tras retroceder un 3% el trimestre anterior, su peor resultado en un año, a medida que la divergencia relativa de las economías estadounidense y europea se refleja en el mercado de divisas.
La actividad manufacturera en la zona euro y Gran Bretaña siguió en profunda recesión en septiembre, mostraron el lunes los datos definitivos.
El índice dólar se acercó de nuevo a su máximo de los últimos 10 meses de 106,84 y cotizaba en 106,51, tras registrar su mejor rendimiento trimestral en un año gracias a la persistente retórica de línea dura de la Reserva Federal y al aumento de los rendimientos de los bonos del Tesoro.
El retorno del bono estadounidense a 10 años avanzaba otros 6 puntos básicos el lunes, a un 4,6289%, cerca del máximo de 17 años del 4,688% alcanzado la semana pasada.
El Congreso estadounidense aprobó a última hora del sábado una ley de financiación provisional con un abrumador apoyo demócrata en un intento por evitar el cuarto cierre parcial del Gobierno federal en una década, aunque los analistas restaron importancia a cualquier impacto a largo plazo en el mercado.