El índice bursátil español Ibex-35 profundizaba el viernes la senda bajista y perdía el nivel psicológico de los 9.100 puntos, tocando su nivel más bajo desde mayo, ante la preferencia por activos refugio en los mercados financieros.
En un contexto de temor que el conflicto entre Israel y Hamás se extienda a otros países de Oriente Próximo, los inversores preferían no tomar posiciones compradoras en renta variable ante la incertidumbre por la posibilidad de nuevos episodios de violencia durante el fin de semana.
A la inquietud geopolítica se sumaban las ventas en el mercado de bonos, que llevaban a las rentabilidades de referencia de Estados a tocar sus niveles más altos desde 2007, debido al temor por el elevado déficit público estadounidense, a la abundante oferta de títulos de deuda y a la perspectiva de unos tipos de interés elevados durante un periodo prolongado.
El jueves el presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, realizó unas declaraciones en las que sugirió que, pese a que la fortaleza de la economía estadounidense podría justificar nuevas subidas de los tipos de interés, el mercado de bonos estaba contribuyendo a restringir las condiciones de financiación y por lo tanto a controlar la inflación.
Estos comentarios reforzaron la idea de que la Fed optará por no subir los tipos en su próxima reunión de política monetaria.
La casa de valores Renta 4 (BME:RTA4) destaca el reciente “recibimiento mixto a resultados (empresariales) en función de la capacidad de fijación de precios” y señala que habrá interés en “la revisión del rating de Italia por parte de S&P, con riesgo de rebaja o puesta en vigilancia negativa tras el giro hacia una política fiscal más laxa”.
Con este panorama, el Ibex-35 veía peligrar el nivel de los 9.000 puntos, cuya pérdida situaría al selectivo en su nivel más bajo desde el 24 de marzo.
A las 07:39 GMT del viernes, el selectivo bursátil español Ibex-35 caía 87,90 puntos, un 0,96%, hasta 9.058,90 puntos, mientras que el índice de grandes valores europeos FTSE Eurofirst 300 retrocedía un 0,88%.
En el conjunto de la semana, el Ibex-35 muestra un descenso del 2,01%, lo que supone su quinta caída semanal consecutiva y el descenso más pronunciado desde la semana cerrada el 4 de agosto.
En el sector bancario, Santander (MC:SAN) perdía un 0,74%, BBVA (MC:BBVA) retrocedía un 0,84%, Caixabank (MC:CABK) cedía un 0,96%, Sabadell (MC:SABE) caía un 0,49%, Bankinter (MC:BKT) se dejaba un 0,44% y Unicaja Banco subía un 0,30%.
Entre los grandes valores no financieros, Telefónica (MC:TEF) retrocedía un 3,10%, Inditex (MC:ITX) cedía un 0,24%, Iberdrola (MC:IBE) se dejaba un 0,77%, Cellnex (MC:CLNX) caía un 0,51% y la petrolera Repsol perdía un 0,50%.
En negativo destacaba Grifols (BME:GRLS), con un descenso de más del 3%, tras anunciar una política de “clawback” para la recuperación de remuneraciones erróneamente otorgadas a ejecutivos del grupo.