Según informa la cadena local CNN, el senador Lindsey Graham considera como un “gran error” destinar sumas de ayuda financiera por separado al régimen de Israel y Ucrania.

Esto, en respuesta al secretario de Estado, Antony Blinken, y el de Defensa, Lloyd Austin, quienes el martes defendieron ante el Comité de Asignaciones del Senado de EE.UU. defendieron semejantes paquestes de ayuda.

“No creo que deberían vincularse y deberíamos separarlos”, dijo el senador republicano por el estado de Missouri, Eric Schmitt. Asimismo, Mitch McConnell, el líder del Senado, también republicano, y la Casa Blanca presionan para aprobarse paquetes de ayuda por separado para las dos partes, en medio de las guerras en las que se involucran.

Aun con todo, hay voces opuestas en el Poder Legislativo estadounidense que rechazan la asistancia millonaria de Washington tanto a Ucrania como, especialmente, a Israel, por los crímenes que comete el régimen de ocupación en Palestina.

Entre esas voces se destaca la diputada demócrata Rashida Tlaib quien ha venido abogando por los derechos de los palestinos en el conflicto palestino-israelí. Esta semana, incluso ha habido un intento por parte de la extrema derecha para eliminar a Tlaib del Congreso, lo cual se ha visto fracasado este miércoles.

La creciente división que se evidencia en la Cámara de Representantes podría resultar en conflictos principalmente sobre las Leyes relacionadas con los intereses de Israel, por la presión que mantiene el lobby sionista en los niveles más altos de la política de Estados Unidos.

Según informes, el grupo prosionista J Street también está presionando a los demócratas en la Cámara de Representantes de Estados Unidos para la aprobación de una resolución en condena al Movimiento de la Resistencia Islámica Palestina (HAMAS) y al Movimiento de Resistencia libanés (Hezbolá).

Mientras, algunos demócratas de la Cámara dieron el 25 de octubre voto negativo a similar resolución proisraelí contra HAMAS.