El beneficio de Apple, Microsoft, Alphabet, Amazon y Meta se dispara un 45% en el tercer trimestre, hasta los 86.398 millones de dólares
Las grandes compañías tecnológicas exhiben músculo financiero. Han cerrado un trimestre récord de ingresos y beneficios. La facturación crece por la mejora de la publicidad digital, el auge de la computación en la nube y, por encima de todo ello, la inteligencia artificial. Esta última ha ocupado buena parte de las llamadas con analistas de los primeros ejecutivos de las empresas, que se han ocupado de hacer valer sus fortalezas en esa tecnología y han redoblado su apuesta por ella, incluso en los casos en que se aprecia menos a primera vista, como Apple o Meta. Al crecimiento de los negocios se suma una mejora de los márgenes por el recorte de gastos acometido tras el mal año 2022, que ha incluido decenas de miles de despidos y otras medidas de ahorro.
Con todo ello, el beneficio agregado de las cinco tecnológicas más emblemáticas (Apple, Microsoft, Alphabet, Amazon y Meta) se ha disparado un 45% en el tercer trimestre del año, hasta los 86.398 millones de dólares (unos 81.400 millones de euros al tipo de cambio actual). Cada una de las cinco compañías ha batido su récord de beneficios de un tercer trimestre. El crecimiento de los ingresos se ha acelerado en el tercer trimestre pese al pinchazo de Apple que, al menos, ha frenado la caída de la facturación hasta solo un 0,7%. Las demás crecen a ritmos de dos dígitos.
El resultado del conjunto del año también va camino de marcar un nuevo máximo, superando a las cifras de 2021. En los nueve primeros meses del año, las cinco empresas citadas han ganado 225.658 millones de dólares, un 26,7% más que en el mismo periodo del año pasado. La facturación, de nuevo con el lastre de Apple, crece un 6,9% en los primeros nueve meses, hasta 1,15 billones.
Microsoft, a la cabeza en inteligencia artificial
Los resultados más redondos han sido los de Microsoft. Su posición es envidiable en la inteligencia artificial generativa, la tecnología que ha deslumbrado al mundo con ChatGPT y que la compañía, socia de OpenAI, va integrando de un modo u otro en sus diferentes productos y servicios. Además, el procesamiento masivo de datos, en parte asociado a la inteligencia artificial, está impulsando su negocio de computación en la nube, donde le gana terreno a Amazon y se distancia de Alphabet.
“Estamos introduciendo rápidamente la inteligencia artificial en todas las capas de la plataforma tecnológica y en todas las funciones y procesos empresariales para aumentar la productividad de nuestros clientes”, señaló Satya Nadella en la conferencia con analistas. “Tenemos la presencia en la nube más completa, con más de 60 regiones de centros de datos en todo el mundo, así como la mejor infraestructura de IA tanto para formación como para inferencia. Además, nuestros servicios de IA están implantados en más regiones que ningún otro proveedor de servicios en la nube”, presumió. Microsoft ha tenido récord de ingresos y de beneficios tanto en el tercer trimestre como en el acumulado de nueve meses. En el último trimestre, facturó 56.517 millones de dólares (+13%) y ganó 22.291 millones (+27%).
Alphabet se vio sorprendida por los avances de Microsoft y su participada OpenAI en inteligencia artificial generativa y desde entonces ha redoblado su apuesta por dicha tecnología, pero las cifras del negocio de computación en la nube se han quedado por debajo de lo esperado, lo que fue castigado por los inversores, a pesar de que su negocio de publicidad digital le permitió lograr un tercer trimestre récord de ingresos (76.693 millones de dólares, +11%) y beneficios (19.689 millones, +41,5%).
La compañía dueña de Google está integrando su asistente Bard en sus servicios y haciendo pruebas en el buscador. “Con la IA generativa aplicada a la búsqueda, podemos atender una gama más amplia de necesidades de información y responder a nuevos tipos de preguntas”, dijo su consejero delegado, Sundar Pichai, a los analistas. “A medida que ampliamos el acceso a nuestros nuevos servicios de IA, seguimos realizando inversiones significativas en apoyo de nuestros esfuerzos de IA. (…) En todo Alphabet, los equipos están buscando formas de operar con la mayor eficacia posible, centrándose en sus mayores prioridades”.
Quien ha sacado un mayor partido a los recortes de costes es Meta, que cerró septiembre con 66.185 empleados, 21.000 menos que un año antes. Mark Zuckerberg prometió apretarse el cinturón y lo ha hecho: “El Año de la Eficiencia siempre tuvo dos objetivos diferentes: convertirnos en una empresa tecnológica aún más fuerte y mejorar nuestros resultados financieros para poder invertir agresivamente en nuestra ambiciosa hoja de ruta a largo plazo. Ahora que hemos superado los despidos más importantes, el resto de 2023 consistirá en crear estabilidad para los empleados, eliminar las barreras que nos ralentizan, introducir nuevas herramientas basadas en IA para acelerar, etcétera”, explicó a los analistas.
Zuckerberg sostiene que “las dos olas tecnológicas en las que estamos inmersos son la IA a corto plazo y el metaverso a largo plazo”. Aparcado algo el metaverso, por ahora ruinoso para la compañía, el fundador de Meta asegura que ya le está sacando partido a la inteligencia artificial. “Las inversiones que hemos realizado a lo largo de los años en IA, incluidos los miles de millones de dólares que hemos invertido en infraestructura de IA, están dando claramente sus frutos en nuestros sistemas de clasificación y recomendación, y mejorando la participación y la monetización”, dijo. Puso como ejemplo que el contenido recomendado por la IA de cuentas que no sigue el usuario es ahora la categoría de contenido de más rápido crecimiento en Facebook y que ha aumentado un 7% el tiempo total pasado en la plataforma. Entre el aumento de los ingresos (del 23,2%, hasta 34.146 millones de dólares) y el recorte de costes, Meta logró un récord trimestral absoluto de beneficios con 11.583 millones, un 164% más que un año antes.
El consejero delegado de Amazon, Andy Jassy, también quiso subrayar que la inteligencia artificial da frutos más allá de su negocio de datos y computación en la nube “Todos nuestros negocios principales están trabajando en aplicaciones de IA generativa para transformar la experiencia de sus clientes”, aseguró. Entre sus aplicaciones está ayudar a los clientes a descubrir mejor los productos que desean, prever el inventario que necesitan en sus distintas ubicaciones y deducir las rutas de transporte óptimas de última milla que deben emplear los conductores. También resaltó avances en publicidad y en su asistente Alexa, aunque reconoció: “Aún nos queda mucho por hacer”. Está en una situación financiera óptima para ello. Aumentó sus ventas un 12,6%, hasta 143.083 millones de dólares, y el beneficio un 244%, hasta 9.879 millones.
El consejero delegado de Apple, Tim Cook, se esforzó también en destacar que los productos de la compañía incorporan grandes avances en inteligencia artificial, aunque haya presumido menos de ello. “Cuando lanzamos iOS 17, incluía prestaciones como Personal Voice y Live Voicemail. La IA es la base de estas prestaciones. Puedes ir hasta las funciones que salvan vidas en el reloj y el teléfono, como la detección de caídas, la detección de colisiones y el electrocardiograma en el reloj. Estas funciones no serían posibles sin la IA. No las etiquetamos como tales, porque las etiquetamos en función de su utilidad para el consumidor, pero la tecnología fundamental que hay detrás es la IA y el aprendizaje automático”, explicó a los analistas.
Cook, incluso, indicó que Apple también apuesta por la IA generativa. “Obviamente, estamos trabajando en ello. No voy a entrar en detalles sobre ello porque realmente no lo hacemos, pero puedes apostar que estamos invirtiendo. Estamos invirtiendo bastante. Vamos a hacerlo de forma responsable. Con el tiempo verán avances en los productos en los que esas tecnologías son el núcleo”, dijo.
La carrera de la inteligencia artificial viene cargada de inversiones multimillonarias y de beneficios también multimillonarios. Y aún falta por presentar sus resultados la compañía que ha experimentado un mayor tirón gracias a las enormes necesidades de procesamiento que conlleva esa tecnología. Se trata de Nvidia, el desarrollador de microprocesadores, que presentará sus cuentas el próximo 21 de noviembre.