Al mismo tiempo, el jefe del Estado Mayor Conjunto de EE.UU. destacó que todas las llamadas se realizaron por los canales correspondientes del Departamento de Defensa.
El jefe del Estado Mayor Conjunto de EE.UU., Mark Milley, declaró este miércoles que no considera que fuera erróneo conversar con su homólogo chino con el objetivo de tomar precauciones para que ambos países no se vieran abocados a una guerra, dado que temía las decisiones que pudiera tomar Donald Trump en sus últimas semanas como presidente.
Al mismo tiempo, destacó que todas las llamadas se realizaron por los canales correspondientes del Departamento de Defensa.
“El general Milley continúa actuando y asesorando dentro de su autoridad de acuerdo con la tradición legítima de control civil de las Fuerzas Armadas y su juramento ante la Constitución”, afirmó, por su parte, su portavoz, coronel Dave Butler.
Mientras, desde la Casa Blanca expresaron este miércoles que el presidente de EE.UU., Joe Biden, tiene plena confianza en la jefatura de Milley.
Los periodistas Bob Woodward y Robert Costa, de The Washington Post, revelaron recientemente en un nuevo libro que el jefe del Estado Mayor Conjunto convocó a altos mandos militares en el Pentágono para revisar los protocolos de acción del Ejército, incluido el uso de armas nucleares, y que les instruyó para que no ejecutaran órdenes sin que él fuera antes informado, temiendo que el entonces presidente, Donald Trump, hubiera enloquecido.
Según los extractos publicados del libro, titulado ‘Peril’ (‘Peligro’), Milley tuvo que llamar en dos ocasiones a su homólogo chino, el general Li Zuocheng, para asegurarle que EE.UU. no atacaría su país.