En los 90, el entonces candidato presidencial peruano Mario Vargas Llosa propuso una política de choque para rescatar una economía en ruinas. Unas medidas que al final aplicó su contrincante, Alberto Fujimori, sin tener mayoría congresal. Más de 30 años después, Argentina se asoma a un escenario similar con el triunfo electoral de Javier Milei.
“Voy a hacer un ajuste de ‘shock’ y voy a poner la economía en equilibro fiscal”, ratificó Milei el martes en el medio local Neura. “Yo hice campaña diciendo que voy a hacer el ajuste y que el ajuste no lo paga la gente de bien, lo pagan los delincuentes, lo paga la casta”, agregó.
No obstante, tendrá una dificultad clave: minoría en el Congreso bicameral argentino. Un escenario parecido al de Fujimori, quien sorteó ese obstáculo y apostó rápidamente por eliminar subsidios, liberalizar precios y privatizar empresas, entre otras acciones.
Para el internacionalista y docente de la Pontificia Universidad Católica del Perú, Óscar Vidarte, la situación en el país andino “había tocado más fondo, la hiperinflación era más dura, había un caos político mayor con violencia interna”, pero coincidió en el diagnóstico.
“Lo que plantea Milei son reformas liberales muy parecidas: reducción en la emisión de pesos, reducción del déficit fiscal, privatizaciones de empresas, pero Milei es mucho más radical”, expresó Vidarte a RT.
El desafío parlamentario
Aunque el mandatario electo afiance una bancada de su partido, La Libertad Avanza (LLA), y las fuerzas del bloque liderado por el exdignatario Mauricio Macri y la exaspirante presidencial Patricia Bullrich, necesitará tejer nuevos apoyos en la Cámara y especialmente en el Senado.
“Fujimori logró las alianzas necesarias para llevar a cabo las reformas económicas”, recordó Vidarte, quien mencionó que “podría haber un canal de diálogo en reformas económicas” con Macri y Bullrich.
“Si es posible una alianza con la derecha tradicional y con el peronismo de derecha, las alianzas van a fluir“, opinó.
En un documento oficial del Ministerio de Economía y Finanzas peruano, con motivo de su bicentenario como nación soberana, se señaló que “a partir de los 90 se implementaron una serie de reformas que permitieron fortalecer el manejo macroeconómico del Perú”.
“El primer gran ajuste fue darle autonomía a cada entidad con la finalidad de mejorar y eliminar la dominancia fiscal”, agregó.
No obstante, reconoció como menesteres unas “reformas que realmente generen cambios en temas de desigualdad, y que sean coincidentes y posibles en el marco de la actual coyuntura política e institucional”.
Efectivamente, la nación andina mostró una notable mejoría económica, con crecimiento constante del PBI, la creación de una moneda que terminó fortalecida (sol) y una disminución progresiva de la pobreza. Empero se recrudeció la desigualdad, con una clase alta asentada en Lima y unas provincias que se ganaron el rótulo de “Perú profundo”, donde escasean servicios básicos.
Ola privatizadora
El lunes, en otra entrevista radial, Milei confirmó que una vez se instale en la Casa Rosada activará su proyecto privatizador, que incluye a la empresa Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF), la firma de aviación comercial de bandera Aerolíneas Argentinas y la agencia de noticias Télam.
“La mayoría de las medidas anunciadas sobre privatizaciones tienen que pasar por el Congreso”, avisó el politólogo argentino Facundo Cruz. “YPF, por ejemplo, requiere de 2/3 de las dos Cámaras”, puntualizó.
Cruz consideró que, además de estructurar una mayoría, necesita erigir un gabinete. Sin embargo, la oficina del presidente electo informó en un comunicado oficial que “no habrá ningún anuncio de nombramientos, respecto a cargos del futuro gobierno, hasta el día de la asunción”.
Analistas han señalado que mientras se llegan a acuerdos, el sucesor de Alberto Fernández tendrá potestad gubernamental para tomar ciertas decisiones, como la reducción del Estado hasta tener solo ocho ministerios.
El factor calle
No obstante, muchos anticipan una oposición callejera y el propio Milei lo admitió. En el programa ‘Multiverso Fantino’, el líder de LLA habló de “minorías bulliciosas” y reiteró que se basará en el uso de la ley.
“Yo tengo mandato, mi compromiso es exterminar la inflación, volver a crecer”, subrayó, al tiempo que remarcó el “cachetazo” de la segunda vuelta electoral como justificante de su plan de gobierno. “Si no hacemos el ajuste fiscal, nos vamos a la hiper[inflación], 95 % de pobres y 70 u 80 % de indigentes”, pronosticó.
Cruz concordó en que Milei “tiene legitimidad electoral”, pero aclaró que “la legitimidad política no está construida porque no tiene una mayoría” y la situación la amerita, dado que “tomará decisiones infelices que afectará a la base que lo votó”.
“Argentina tiene una base sindical, una base social mucho más organizada que la que tenía el Perú en el 90, el problema más difícil que tendrá Milei será a nivel social, conseguirá un fuerte rechazo, con el encarecimiento de la vida, eliminación del subsidio, donde la ayuda del Estado se va reducir a cero”, estimó Vidarte.
De hecho, el jueves de esta semana, la Unidad Piquetera tiene previsto una marcha a la emblemática Plaza de Mayo, en Buenos Aires, en la primera protesta tras la segunda vuelta.
“Desde el movimiento piquetero no podemos, ni vamos a aceptar mansamente este ajuste que pagaremos con más y más pobreza e indigencia, contra una población que ya no soporta mas ataques a sus condiciones de vida”, sostuvo.
En un comunicado difundido por la prensa local, hablaron de “ajustazo”, mientras que el dirigente de la organización, Eduardo Belliboni, destacó la “lucha de los trabajadores” que se avecina.
“Vamos a movilizarnos a Plaza de Mayo donde, como todos los jueves hace más de 40 años, se reúnen las Madres de Plaza de Mayo y vamos a abrazarlas”, manifestó.
Entretanto, todavía está por definirse el rol que jugarán los gobernadores, en un país federal como la Argentina. “Dependerá de qué postura tomen ellos con la Casa Rosada y qué estrategia defina Milei con las provincias. Si hay cooperación, entonces el peronismo será menos monolítico, tendrá menos unidad y las protestas serán más esporádicas“, cerró Cruz.
