La Unión Europea está elaborando medidas legislativas que permitan a los países del bloque limitar o cortar completamente el acceso a las redes europeas de transporte de gas a los proveedores de Rusia y Bielorrusia, reportó este viernes Financial Times, que tuvo acceso a un borrador del proyecto propuesto por Bruselas.
Según el documento, los Estados miembros de la UE podrán “limitar parcial o, en casos justificados, totalmente” el acceso a las infraestructuras a los operadores de gas de Rusia y Bielorrusia “cuando sea necesario para proteger sus intereses esenciales de seguridad”.
Un alto funcionario europeo afirmó que esta iniciativa podría permitir a las empresas energéticas de la UE rescindir los contratos con los proveedores de gas rusos sin tener que pagar enormes indemnizaciones.
Se prevé que los negociadores de los países del bloque comunitario y el Parlamento Europeo aprueben el proyecto el viernes, pero la versión final aún deberá ser aprobada formalmente por el Parlamento y los Estados miembros, escribe FT.
El periódico señala que las propuestas pretenden que los países europeos dejen completamente de importar gas ruso para 2027.
Mientras, un informe de Global Witness basado en los datos de la empresa analítica Kpler revela que los países de la UE compran ahora más gas natural licuado ruso que antes del inicio de la operación militar especial de Moscú. Así, entre enero y julio de 2023, las naciones del bloque importaron un total de 22 millones de metros cúbicos de GNL, frente a los 15 millones que se compraron en el mismo periodo de 2021, lo que supone un aumento del 40 %.