Miembros de la familia al-Qedra, que resultaron heridos durante el bombardeo israelí, reciben tratamiento en el hospital Naser en Jan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza. (Foto: AFP)
El régimen de Israel ha matado a más de 300 trabajadores del sector de la salud desde el inicio de la guerra en Gaza, violando las leyes internacionales.
El Ministerio de Salud de Gaza ha advertido nuevamente este lunes de la dramática situación del sistema sanitario en Gaza, con cerca de 300 muertos entre el personal médico, más de 300 heridos y una ocupación de camas del 276 %, 233 en cuidados intensivos.
En esta situación límite, además de las víctimas por la guerra, la sanidad gazatí tiene que afrontar el incremento de enfermedades, con más de 325 afectados por infecciones, entre otras dolencias, como las respiratorias.
“El personal sanitario hace lo que puede ante la falta de medicinas, escasez de agua y combustible o la ausencia de seguridad”, ha lamentado el ministerio.
El domingo por la noche, las fuerzas israelíes continuaron violando las leyes internacionales al atacar el Hospital Infantil Naser en Jan Yunis, matando a una mujer e hiriendo a varios palestinos más. Al mismo tiempo, los soldados del régimen sionista atacaron al personal médico del hospital Kamal Adwan en Gaza.
Según la cartera de Salud de Gaza, con solo 11 de los 36 hospitales de Gaza parcialmente operativos y capaces de admitir nuevos pacientes, los servicios de salud se ven gravemente afectados por la agresión israelí.
Desde el comienzo de la guerra, Israel ha puesto entre sus objetivos los hospitales del enclave palestino. De hecho, diez días del inicio de su ofensiva, mató a al menos 500 personas en un ataque aéreo contra el hospital Ahli Arab, en la ciudad de Gaza.