Angélica Ferrer
“Una vez que Putin asuma la presidencia temporal de los BRICS, podría controlar mejor los flujos económicos y las transacciones entre los miembros del bloque, algo que antes ya le había permitido diversificar el comercio de Rusia. Al mismo tiempo, podrá fortalecer la idea de desdolarizar el mundo con la ayuda de China y le abrirá la puerta a un mayor crecimiento económico (…), con lo que estimo que registrará 4,5%, incluso 5% al cierre de 2024″, observa el experto.
La resiliencia rusa a los obstáculos
“Rusia vio interrumpido su comercio, sobre todo con Europa, porque varios países [de la región] estaban entre sus principales socios. Pero lo que ahora ha hecho el Gobierno ruso es generar nuevas relaciones comerciales o incrementar las que ya tenía con ciertos socios”, explica la también doctora en Relaciones Internacionales de la UNAM.
Los retos a enfrentar
“Será relevante poner atención al sector energético, ya que Rusia es una potencia de primer nivel en este ámbito. Es relevante desarrollar otras ramas de la economía que le permitan maniobrar e incrementar tanto la productividad como el crecimiento del PIB”, señala Rosas.