Las voces de los estudiantes estadounidenses resuenan con fuerza en los campus universitarios de todo el país para exigir el fin de la guerra en Gaza. Desde hace dos semanas, una oleada de protestas contra el apoyo del Gobierno de EEUU a Israel en su ofensiva contra la Franja de Gaza ha inundado más de 25 universidades y establecido un movimiento de protestas propalestino sin precedentes.
El presidente estadounidense, Joe Biden, ha condenado la violencia en las manifestaciones este jueves en su primera declaración sobre lo que está ocurriendo en las universidades de todo el país. De esta forma, ha reafirmado que “las protestas no son pacíficas”, además de subrayar la necesidad de que “prevalezca el orden”.
Son ya más de 2.000 los manifestantes detenidos por las autoridades policiales desde el 18 de abril, según ha señalado The Washington Post. El último operativo ha sido en el campus de la Universidad de California (UCLA) en Los Ángeles, donde los agentes desmantelaron este jueves un campamento propalestino instalado desde el martes, y arrestaron a unos 200 protestantes.
Según ha señalado la cadena CNN, la Policía había considerado esta instalación como “asamblea ilegal”, y la dirección de la UCLA alertó a los manifestantes de la inmediatez de la intervención policial. Asimismo, alertó de que quienes siguieran entonces en el campamento podrían “estar cometiendo un delito” y los estudiantes que se estuvieran manifestando se arriesgaban a “ser expulsados” de la universidad.
Además, durante la madrugada del miércoles se produjeron diversos enfrentamientos contra manifestantes pro-israelíes que aparecieron encapuchados y enmascarados en el campamento arrojando objetos contra los propalestinos. Tras este altercado, en la madrugada de este jueves los agentes comenzaron a derribar las barricadas para desmantelar el campamento e ir trasladando a los detenidos en autobuses.
La ‘zona cero’ de las protestas ha sido la Universidad de Columbia, en Nueva York, donde los estudiantes llevaban manifestándose desde el 17 de abril. Allí, los universitarios tomaron el emblemático Hamilton Hall, ocupado también por estudiantes en las protestas contra la guerra de Vietnam en 1968, y finalmente las protestas han culminado en la noche de este martes con cerca de 400 detenciones por parte de la Policía neoyorquina.
De acuerdo con la BBC, los agentes desalojaron a cientos de alumnos que permanecían atrincherados en las instalaciones educativas exigiendo el boicot a empresas e individuos con vínculos con Israel. Los protestantes habían bloqueado los accesos con mesas y sillas apiladas en los pasillos a modo de barricadas, pero las autoridades consiguieron finalmente desmantelarlas.
En este sentido, ya han comparecido al menos 20 detenidos ante un tribunal de Nueva York durante la noche de este jueves, en base a información compartida por NBC News.