Las fuerzas armadas de Israel y Hizbulá han vuelto a realizar este jueves un nuevo cruce de bombardeos entre el país hebreo y el Líbano. De una parte, el Ejército israelí ha llevado a cabo un nuevo ataque contra “edificios militares” e “infraestructura terrorista” del partido-milicia chií Hizbulá en el sur del país árabe. De otro, el grupo armado libanés ha lanzado 40 proyectiles sobre el norte de Israel, que han sido “interceptados con éxito”, según las Fuerzas de Defensa de Israel, aunque han provocado incendios.
Este nuevo intercambio de ataques sucede en plena escalada de la tensión entre ambas partes y tan solo un día después de que Hizbulá llevase a cabo una ofensiva sobre un kibutz al norte del país hebreo con 160 cohetes, como represalia a un bombardeo previo de Israel en Líbano en el que murió un comandante chií.
El ataque de Israel de este jueves ha tenido lugar durante la madrugada, cuando aviones de combate israelíes atacaron “edificios militares” en Aita al Chaab e “infraestructura terrorista” en Einta -ambas en el sur de Líbano-, según ha manifestado el Ejército israelí a través de un breve comunicado publicado en su página web.
Durante la jornada ha circulado además en redes sociales un vídeo en el que se puede ver a militares israelíes usando un fundíbulo o catapulta pequeña para lanzar bolas incendiarias hacia territorio libanés con el objetivo de provocar incendios al otro lado de la frontera.
Según las informaciones recogidas por el diario The Times of Israel, las autoridades estarían intentando con ello acabar con la cobertura boscosa en esta zona de Líbano para poder identificar más fácilmente a las fuentes de disparos o la posible infiltración de miembros de Hezbolá.
El uso de las catapultas ha sido aprobado por el Ejército, que en el pasado ha usado otros medios para quemar vegetación en el lado libanés de la frontera, incluido el lanzamiento de gasolina desde drones, tal y como ha informado el diario israelí ‘Haaretz’. Las autoridades no se han pronunciado oficialmente sobre esta práctica.
Los militares israelíes han señalado que los sistemas de defensa aérea habían lanzado un interceptor contra un “objetivo sospechoso”, si bien ha dicho que “fue una identificación errónea”. “Se activó la alerta por cohetes y misiles por el temor de la caída de fragmentos del interceptor”, ha zanjado. Horas después, comunicaron la interceptación de tres de los cinco “objetos aéreos sospechosos” que irrumpieron en su espacio aéreo desde el sur de Líbano.
Israel ha informado cerca de las 12:30 GMT (14:30 en España) de un ataque de Hizbulá de más de 40 proyectiles hacia el norte del país hebreo. La ofensiva del grupo armado chií ha sido difundida por las Fuerzas de Defensa de Israel junto con un vídeo grabado desde la azotea de un edificio.