Dos grandes incendios que se declararon este domingo a las afueras de Atenas han obligado a las autoridades a evacuar a miles de personas, mientras cientos de bomberos luchan por contener las llamas en medio de fuertes vientos racheados.
El incendio que más preocupa a las autoridades es el que se declaró cerca de la localidad de Varnava, unos 40 kilómetros al norte de la capital y que se está propagando muy rápidamente hacia el sureste y el lago de Marathón, dijo una portavoz de los Bomberos. Unos 250 bomberos con 79 camiones, 15 aviones y 11 helicópteros cisterna operan en la zona para contener el incendio que ya ha obligado a la evacuación preventiva de siete localidades en las que viven unas 4.000 personas.
Algunas casas que se encuentran dispersas en la zona han sido alcanzadas por las llamas, mientras que un equipo especial de la Policía tuvo que liberar a decenas de personas que se encontraban atrapadas en unos 25 coches tratando de huir del fuego, informa el portal News247. Cuatro personas han tenido que ser trasladadas a un hospital cercano con problemas respiratorios, según la misma fuente.
Una gran nube de humo ha llegado hasta el centro de Atenas y ha oscurecido el cielo de la capital. Mientras, unos 70 bomberos con 18 camiones, cinco aviones y 3 helicópteros cisterna luchan contra otro gran incendio cerca de la localidad de Megara, unos 40 kilómetros al oeste de Atenas, un fuego que ha obligado a las autoridades a evacuar el pueblo de Neo Mazi.
“Ya se han quemado algunas casas, mientras que otras están en peligro” de que sean alcanzadas por las llamas, señaló el alcalde de Megara, Panagiotis Marguetis, a la radio privada SKAI 100,3. Según el portal digital Tovima, los bomberos están operando para evitar que el fuego se propague a un bosque cercano. Durante las últimas 24 horas se han declarado en Grecia unos 40 incendios, la mayoría de los cuales pudieron ser sofocados antes de que se expandieran, informó el cuerpo de Bomberos.
Si bien las temperaturas actuales son normales para la temporada, dos olas de calor extremo que sufrió el país en junio y julio, con temperaturas que sobrepasaron en algunas regiones, incluida Creta, los 44 grados, han secado la vegetación, lo que aumenta el riesgo de incendios forestales.
Según el Observatorio Nacional de Atenas, Grecia vivió en 2024 su mes de julio más caluroso desde que se empezaron a llevar registros en 1960. La temperatura media se situó en los 27 grados centígrados, 2,9 grados por encima del valor medio registrado el mismo mes entre 1991 y 2020.