El Dr. Hussam Abu Safia, director del hospital Kamal Adwan, denunció el martes que la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del centro sanitario quedó fuera de servicio tras un intenso bombardeo israelí que provocó un incendio en el centro médico.
Detalló que el personal allí se vio obligado a extinguir el fuego utilizando métodos muy primitivos, incluso utilizando mantas. También tuvieron que trasladar a los pacientes, incluidos niños, a otra sala para seguir proporcionándoles el tratamiento médico esencial.
El médico también advirtió sobre la drástica situación del centro sanitario, señalando que el edificio del hospital había sufrido muchos daños por otros ataques israelíes que tuvieron lugar anteriormente.
Medios de comunicación locales han anunciado que el ejército israelí realizó al menos nueve ataques contra edificios residenciales cercanas al hospital, matando e hiriendo a un número indeterminado de civiles.
La cadena catarí de noticias Al Jazeera Arabic también ha informado de que ha habido varias víctimas después de que las fuerzas israelíes bombardearan la casa de la familia Al-Sisi en el norte de Beit Lahiya, cerca del hospital Kamal Adwan.
Asimismo, al menos dos miembros del personal médico en el hospital Al-Awda, en el norte del enclave palestino, han resultado heridos después de que el ejército israelí detonara robots cargados de explosivos en las inmediaciones del hospital. La metralla del ataque hirió a esos miembros del personal, según ha informado Al Jazeera.
La situación en el norte de la Franja de Gaza es sombría, con estos hospitales apenas funcionales siendo objeto de ataques implacables del régimen.
El norte de Gaza, particularmente Yabalia y Beit Lahia, han sido objetos de intensos ataques israelíes desde hace más de dos meses. El régimen también ha impuesto un severo bloqueo a la zona en el marco de una táctica conocida como “el Plan de los Generales” iniciativa con la que el régimen busca evacuar toda la zona norte del enclave para posteriormente ocuparla.
A pesar de que el régimen afirma que el plan está dirigido al Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS), el diario israelí Haaretz advirtió a principios de noviembre que el objetivo de la iniciativa es ejercer una “limpieza étnica” de la zona norte de la Franja, expulsar a los palestinos y preparar el terreno para “una ocupación y asentamiento judío prolongado”.
La campaña de brutales agresiones de Israel en Gaza, dejan ya más de 45 059 muertos y ha causado heridas a otras 107 041, la mayoría mujeres y niños.
