La Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos de Bolivia (Emapa) inició este martes la distribución de 60 reses por día en La Paz y El Alto, con el objetivo de frenar la especulación en el precio de la carne de res que, pese a todas las medidas del Gobierno de Luis Arce, su precio continúa al alza.
El producto se comercializará a Bs 34 (US$ 4,7) el kilo gancho, Bs 2 menos que el valor promedio en el mercado informal, donde actualmente se cotiza en Bs 36 (US$ 5,06).
Grover Lacoa, viceministro de Comercio y Logística Interna, explicó que la medida busca garantizar oferta suficiente y precios accesibles para la población.
Las reses serán entregadas directamente a carniceros de ambas ciudades, en coordinación con Emapa, que almacenará la mercadería en cámaras frigoríficas para asegurar su disponibilidad diaria a partir de las 06.00.
Franklin Flores, gerente general de Emapa, detalló que la iniciativa responde al reciente incremento irregular del kilo gancho en los mercados locales.
«Hemos avanzado en los procesos administrativos y en acuerdos con productores ganaderos para asegurar un suministro estable y justo», señaló.
La estrategia incluye ampliar la logística de distribución para evitar que intermediarios manipulen los precios, un problema recurrente que afecta a la canasta familiar y eleva el costo del producto final hasta los Bs 60 (US$ 8,44).
La intervención de Emapa forma parte de un plan permanente para estabilizar el mercado de la carne, en un contexto donde la especulación ha elevado los costos en sectores informales.
Las autoridades reiteraron que el abastecimiento continuará de manera sostenida, priorizando el acceso a alimentos básicos a precios regulados.
Sin embargo, incluso el precio preferencial que ofrece Emapa refleja un marcado incremento en el costo, pues el kilo gancho se comercializaba en 2024 a Bs 27 (US$ 3,80) e inclusive los intermediarios exigían un precio menor.