Una batería de sistemas móviles de defensa antiaérea S-400 de Rusia.
Rusia tiene planeado desplegar sus escudos S-400 y S-300 en la zona cero con Ucrania, Bélgorod, para fortalecer su capacidad defensiva, afirma un nuevo informe.
Tal y como ha anunciado este martes un reporte de Defense express, citando al jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Ucrania., los sistemas antimisiles S-400 y S-300 se están desplegando en la región de Bélgorod, con el fin de proteger los principales puestos de control en la zona limítrofe, así como las áreas de retaguardia de los militares rusos que actualmente tienen bajo control la ciudad de Járkov (noreste de Ucrania).
El S-400 ruso es una modernización del S-300 soviético, lo cual es todavía más peligroso que la antigua generación, debido a una estación de radar mucho más poderosa y la introducción de nuevos misiles antiaéreos de largo alcance, señala la fuente.
Esto, mientras las fuerzas ucranianas han bombardeado la misma jornada el poblado ruso de Golóvchino, localizada a unos 10 kilómetros de la frontera con Ucrania. Es más, el 1 de abril también, las Fuerzas Amadas ucranianas violaron el espacio aéreo de Rusia tras cruzar la frontera común y entrar en Bélgorod, para luego provocar un incendio en un depósito ruso de petróleo.
- Vídeo: Depósito de petróleo ruso en llamas tras ataque de Ucrania
Las fuerzas ucranianas han bombardeado el poblado ruso de Golóvchino, a 10 km de Ucrania, y, como resultado, una persona ha resultado herida.
¿Para qué sirven los S-400 rusos?
El sistema de defensa aérea S-400 es uno de los sistemas móviles de defensa antiaérea más sofisticados de Rusia, capaz de derribar misiles a una profundidad de 400 km, que todavía no ha sido incautada o destruida por Ucrania durante la operación rusa, iniciada el 24 de febrero.
Los S-400 rusos son conocidos además de su largo alcance por la capacidad de interceptar objetivos hipersónicos y golpear hasta 80 objetivos aéreos simultáneamente.
De hecho, el escudo de ser instalado en Bólgorod, geográficamente en la vecindad de la zona ucraniana de Járkov, hará frente a un posible ataque de la Fuerza Aérea del país vecino, mientras Moscú acaba de comenzar la segunda fase de su operación en Ucrania con el objetivo de liberar regiones de Donetsk y Lugansk (este de Ucrania), la que según el Kremlin busca la “desmilitarización” y la “desnazificación” total de este país europeo.