Olaf Scholz dio un discurso del Primero de Mayo dedicado a la guerra en Ucrania mientras algunos asistentes le abucheaban al grito de “paz sin armas”.
El canciller alemán, Olaf Scholz, defendió en su discurso con motivo del Primero de Mayo este domingo (01.05.2022) la necesidad de enviar armas a Ucrania, lo que le valió los abucheos de un nutrido grupo de manifestantes. “No puede ser que algunos miren los libros de historia, miren donde estaban fronteras e intenten por la fuerza mover fronteras, eso es imperialismo y no lo queremos en Europa,” dijo en la central sindical DGB en Düsseldorf (oeste).
El canciller socialdemócrata afirmó que Alemania seguirá apoyando a Ucrania “con dinero y ayuda humanitaria, pero también, para que pueda defenderse, con envíos de armas, como hacen muchos otros países, porque es necesario ahora mismo”. En ese momento, un numeroso grupo de manifestantes que se había mezclado con los asistentes al acto redobló sus gritos de “Paz sin armas”, que, unidos a los pitidos y abucheos que comenzaron con la aparición del canciller, obligaron al canciller a hablar a voz en grito para hacerse oír.
Algunos de los asistentes portaban, por otro lado, banderas ucranianas, en un acto en el que Scholz se esforzó en presentar la “solidaridad” con Ucrania como continuación de las políticas sociales en que centró su campaña electoral.
Defensa de sus medidas sociales
Entre estas destacó la subida del salario mínimo a 12 euros por hora, una medida que según dijo beneficiará a seis millones de trabajadores en Alemania, aunque el Ejecutivo cuidará de que “siga subiendo” ya que “todos deben poder vivir de lo que ganan con su duro trabajo”.
El incremento del gasto en defensa y seguridad no llevará al Gobierno de coalición de socialdemócratas, verdes y liberales a abandonar sus iniciativas “para una sociedad más justa y solidaria,” prometió el canciller. Además, recordó las ayudas para familias de escasos recursos con niños y las medidas impulsadas para hacer más asequible la vivienda.
Defendió por último una gran transición energética que permita a la industria independizarse de los combustibles fósiles, que según afirmó servirá para cuidar el medio ambiente, crear nuevos puestos de trabajo y hacer que Alemania no pueda ser chantajeada desde fuera. Los trabajadores de la industria dicen “hazlo, queremos estar ahí cuando empiece la nueva era,” aseguró el canciller.
Un Primero de Mayo marcado por la guerra
Con motivo del Día del Trabajador, hubo otros actos conmemorativos en Alemania, en muchos casos marcados también por la guerra en Ucrania. El presidente de la Confederación de Sindicatos Alemanes (DGB), Reiner Hoffmann, hizo un llamamiento a los ricos para que asuman una parte mayor de la carga de los costos adicionales resultantes de la guerra. Mientras tanto, el líder sindical Frank Werneke adviritó contra una carrera armamentista a raíz del gran programa de rearme anunciado por el gobierno alemán.
Aunque Alemania debe ser capaz de defenderse, afirma Werneke, según un extracto adelantado de su discurso en la ciudad de Mainz, en el oeste de Alemania, “no queremos una nueva carrera armamentista que se produzca a expensas de inversiones urgentes en bienestar social, educación y protección del clima”, dirá el jefe sindical de Verdi.
También hay previstos manifestaciones en moto y bicicleta, protestas contra las restricciones del coronavirus y manifestaciones y acciones de grupos de izquierda y de izquierda radical. Se espera que hasta 20.000 personas se unan a una manifestación en el distrito Neukölln de Berlín, donde la policía mantiene desplegados unos 6.000 agentes.
lgc (efe/dpa)