No todos estás de acuerdo con ciertas declaraciones que dejan entrever una ampliación del conflicto.
Guerra Rusia-Ucrania, en vivo: drones ucranianos hundieron dos barcos rusos Raptor en el Mar Negro, será verdad, en esta guerra de desinformación entre Rusia y Occidente.
Con cada visita (los secretarios de Estado y de Defensa viajaron a Kiev el fin de semana pasado), la promesa del compromiso de EE. UU. con una victoria ucraniana parece crecer, incluso cuando la forma en que EE. UU. define la victoria sigue siendo incierta.
El domingo, un día después de su visita a Ucrania, Pelosi dijo en una conferencia de prensa en Polonia:
“Estados Unidos apoya a Ucrania. Apoyamos a Ucrania hasta que se obtenga la victoria. Y apoyamos a la OTAN”.
Pelosi, la segunda en la línea para suceder al presidente Joe Biden, es la funcionaria estadounidense de más alto rango que visita Kiev desde que comenzó la guerra, y sus palabras tienen peso, ya que parecen subrayar una visión ampliada de los objetivos de guerra de Estados Unidos y sus aliados.
Su visita, con una delegación del Congreso, siguió a una visita conjunta a Kiev del Secretario de Estado Antony Blinken y el Secretario de Defensa Lloyd Austin el domingo pasado.
Austin causó cierta controversia y debate después cuando pareció cambiar el objetivo de la guerra de defender la independencia y la soberanía territorial de Ucrania a debilitar a Rusia.
“Queremos ver a Rusia debilitada hasta el punto de que no pueda hacer el tipo de cosas que ha hecho al invadir Ucrania”, dijo Austin, dando a entender que Estados Unidos quería erosionar el poder militar ruso en los años venideros, presumiblemente tanto tiempo. mientras el presidente Vladimir Putin de Rusia permanece en el poder.
Roles
En un acontecimiento positivo el domingo, las Naciones Unidas y el Comité Internacional de la Cruz Roja ayudaron a organizar lo que se describió como una evacuación “continua” de civiles de la acería de Azovstal en Mariupol, donde se refugiaron con un número cada vez menor de civiles ucranianos, soldados que se han negado a rendirse a los rusos.
Entre 80 y 100 civiles llegaron en un convoy de autobuses a un centro de alojamiento temporal 18 millas al este de la ciudad, en el pueblo de Bezimenne.
La evacuación parecía ser el fruto de una visita a Putin en Moscú y a Zelenski en Kiev la semana pasada por parte de António Guterres, secretario general de la ONU, quien calificó la guerra en Ucrania de “absurdo”.
Guterres y la Cruz Roja han estado trabajando para hacer llegar ayuda humanitaria y suministros de alimentos y agua a los civiles atrapados por los combates; cualquier negociación de paz seria todavía parece lejana.
En un mensaje de Twitter, Zelenski aplaudió la evacuación de lo que dijo que era un “primer grupo de unas 100 personas” y dijo que “mañana nos reuniremos con ellos en Zaporizhzhia”.
La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU, u OCHA, dijo en un comunicado que no proporcionaría detalles del esfuerzo mientras continuara; e espera que se reanuden más evacuaciones el lunes.
Las fuerzas rusas aún no han podido tomar finalmente la última porción de Mariupol, que ya no importa militarmente, pero que ha sido un símbolo inspirador de la valentía, la moral y la resistencia de Ucrania que seguramente pasará a la historia de Ucrania.
Pero si hay un nuevo consenso aliado sobre el suministro de Ucrania con armas más pesadas y sofisticadas para la última etapa de la guerra en el este de Ucrania, no hay consenso aliado sobre cambiar el objetivo de la guerra de Ucrania a Rusia.
Hay una sensación en Europa de que “Estados Unidos está arrastrando a todos a una guerra diferente”, dijo François Heisbourg, un analista de defensa francés, citando comentarios similares de Biden sobre “el carnicero de Moscú” y cómo “Putin debe irse”.
Algunos se preguntan qué está tratando de decir o hacer Washington.
“Ayudar a Ucrania a prevalecer no se trata de librar una guerra contra Rusia por razones relacionadas con su gobierno”, dijo Heisbourg.
“El cambio de régimen puede ser una visión, pero no un objetivo de guerra”.
Él y otros dijeron que esa charla de Washington encaja perfectamente con la narrativa de Putin de que la OTAN está librando una guerra contra Rusia y que Rusia está librando una guerra defensiva para su supervivencia en Ucrania.
Eso puede darle a Putin la excusa el 9 de mayo, la celebración anual de la victoria soviética sobre la Alemania nazi, para declarar esta “operación militar especial” una guerra, lo que le permitiría, si así lo decide, movilizar a la población y utilizar reclutas ampliamente en la batalla.
Hablar de la victoria sobre Rusia “le da munición fácil al otro lado y crea el temor de que Occidente pueda ir más allá, y no es lo que queremos”, dijo Ulrich Speck, un analista alemán.
“No queremos cortar a Rusia en pedazos”.
Gérard Araud, ex embajador de Francia en EE. UU. y la ONU, comentó en Twitter:
“El apoyo a Ucrania en sus modalidades y sus objetivos debe ser acordado a nivel político entre aliados. En este momento, estamos caminando sonámbulos hacia nadie sabe dónde”.
Reacción
En respuesta, Moscú ha elevado el tono de su propia retórica.
El miércoles, Putin dijo que cualquier país que “cree una amenaza estratégica para Rusia” durante esta guerra en Ucrania puede esperar “ataques de represalia” que serían “rápidos como un rayo”.
Días antes, el canciller ruso, Sergey Lavrov, dijo que “la OTAN esencialmente va a la guerra con Rusia a través de un proxy y armando ese proxy”.
Las fuerzas armadas de Putin, después de haber perdido lo que Gran Bretaña estima que fueron al menos 15.000 muertos en acción —eso es más que en toda la guerra de la Unión Soviética en Afganistán— ha estado luchando para cortar las líneas de suministro de armas, municiones y armas pesadas occidentales a las fuerzas ucranianas en este de Ucrania.
El domingo, los rusos dijeron que habían bombardeado una pista y un depósito de municiones en un aeródromo militar cerca de Odesa que almacenaba armas occidentales, y Rusia ha estado intentando atacar carreteras y especialmente terminales ferroviarias, ya que la mayoría de las armas pesadas viajan hacia el este por tren.
El objetivo ruso es aislar o rodear lentamente la mayor parte del ejército de Ucrania al este del río Dnipro y privarlo de nuevos suministros.
Pero ese esfuerzo demoledor avanza lentamente, con feroces batallas de artillería y muchas bajas en ambos bandos.
Ahora hay escasez de nafta y diesel al menos para uso civil.
No es solo el ejército de Ucrania el que se está quedando sin suministros debido al bloqueo de los puertos ucranianos por parte de Rusia y los ataques a refinerías y depósitos de combustible.
Se han visto largas filas para comprar combustible incluso en ciudades como Lviv, y existe preocupación por el impacto de la escasez en la agricultura, incluso en campos que no han sido afectados por la guerra.
Un informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación dijo que solo una quinta parte de casi 1300 grandes agronegocios encuestados por el gobierno a mediados de marzo tenían suficiente combustible para operar el equipo agrícola necesario para sembrar maíz, cebada y otros cultivos esta primavera, que es ya está provocando el aumento de los precios de los alimentos en países alejados de Ucrania.
En un posible indicio de que la moral rusa está decayendo, el jefe de personal de las fuerzas armadas rusas, el general Valery Gerasimov, el principal oficial uniformado del país, realizó una visita a una peligrosa posición de primera línea en el este de Ucrania este fin de semana en un esfuerzo por “ cambiar el curso” de la ofensiva de Rusia allí, según un alto funcionario ucraniano con conocimiento de la visita.
Las fuerzas ucranianas lanzaron un ataque contra un cuartel general ruso en Izium el sábado por la noche, pero Gerasimov ya se había ido para regresar a Rusia, dijo el funcionario.
Aún así, unos 200 soldados, incluido al menos un general, murieron, dijo el funcionario ucraniano, que habló bajo condición de anonimato para hablar sobre una operación militar delicada.
Un funcionario estadounidense, que habló bajo condición de anonimato, confirmó que Gerasimov había estado en el este de Ucrania, pero no confirmó el resto del relato ucraniano.
Los combates se han intensificado alrededor de la gran ciudad oriental de Kharkiv en los últimos días, ya que las fuerzas ucranianas han intentado alejar a las unidades rusas.
Aunque las ganancias han sido pequeñas, son emblemáticas de la estrategia de las fuerzas ucranianas y rusas a medida que la guerra avanza en su tercer mes, una que se enfoca en una aldea a la vez y aprovecha el fuego de artillería concentrado para desalojar a los demás.
El ejército de Ucrania dijo en un comunicado el sábado que había podido retomar cuatro aldeas alrededor de Kharkiv:
Verkhnya Rohanka, Ruska Lozova, Slobidske y Prilesne.
Los reclamos han sido difíciles de verificar ya que gran parte de esas áreas están actualmente cerradas a los medios;
El domingo, Ucrania anunció que había rechazado los avances rusos hacia las aldeas en el Donbas, pero eso tampoco pudo confirmarse.
Las fuerzas ucranianas también fueron sospechosas de otro ataque en la frontera cerca de la ciudad rusa de Belgorod, un área de preparación para las fuerzas rusas, donde se produjo un incendio en una instalación del Ministerio de Defensa, dijo el gobernador regional.
Las fuerzas rusas que controlan la ciudad de Kherson, en el sur de Ucrania, y la provincia circundante comenzaron a imponer el domingo una transición del rublo ruso a la moneda ucraniana, una medida que las autoridades ucranianas describieron como parte de un intento de limpiar una parte del país de su identidad nacional e incrustarlo en la esfera de influencia de Moscú.
Al mismo tiempo, los ucranianos informaron el domingo que casi todo el servicio celular y de internet en el área estaba caído.
El Ministerio del Interior de Ucrania acusó a las fuerzas rusas de cortar el servicio, diciendo que era un intento de evitar que los ucranianos vieran información veraz sobre la guerra.
La actriz de Hollywood Angelina Jolie, quien ha sido representante especial del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados desde 2011, realizó su propia visita sorpresa a Ucrania durante el fin de semana, visitando la ciudad oriental de Lviv para reunirse con los ucranianos desplazados del este que han encontrado refugio allí, incluidos los niños que reciben tratamiento por las heridas sufridas en el ataque con misiles de Rusia en la estación de tren de Kramatorsk a principios de abril.
Pelosi estuvo acompañada por legisladores cuyos comentarios se hicieron eco en gran medida de los suyos.
“Esta es una lucha de libertad contra la tiranía”, dijo el representante Adam Schiff, D-Calif.
“Y en esa lucha, Ucrania está en primera línea”.
El representante Jason Crow, D-Colo., un veterano y miembro del comité de inteligencia y servicios armados de la Cámara de Representantes, dijo que su enfoque estaba en el suministro de armas.
“Tenemos que asegurarnos de que los ucranianos tengan lo que necesitan para ganar”, dijo.
Elogiando la valentía de Ucrania, dijo:
“Estados Unidos de América está en esto para ganar, y apoyaremos a Ucrania hasta que se logre la victoria”.
Pero como siempre, lo que se entiende por “victoria”, ya sea que implique expulsar a Rusia por completo de Ucrania o simplemente bloquear su avance hasta que su ofensiva pierda fuerza y se produzcan negociaciones, sigue siendo una pregunta abierta.
Lo mismo ocurre con la cuestión igualmente central de lo que Putin decide que es una victoria suficiente para su propia guerra elegida.
