En lo que va del año la Comisión Nacional contra la Biopiratería (CNB) detectó 28 casos de biopiratería en el mundo relacionados con el uso indebido de recursos genéticos peruanos, informó el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi).Sostuvo, además, que entre los casos de biopiratería de productos de origen peruano detectados por la citada Comisión figuran: la sangre de grado (66 casos), la maca (39), anacardium occidentale (27), camu camu (10), achiote (10), maíz (9), manteca de uccuba (7), ungurahui (7), sacha inchi (7), tanacetum balsamita (6), entre otros. Indecopi mencionó que en la actualidad, la CNB, en coordinación con el Ministerio de Relaciones Exteriores, tramita la protección de estos recursos en oficinas de patentes de China, Estados Unidos de América (USA), Japón, Brasil, Canadá, Corea, Australia, Filipinas, Argentina, Francia, entre otras.
Biopiratería: sangre de grado y maca son los productos peruanos más afectados en el mundo
Indecopi mencionó que desde el 2004 (año de su creación) a la fecha la Comisión Nacional contra la Biopiratería (CNB) que preside dicha institución, ha identificado un total de 246 casos de biopiratería en el sistema de patentes de diversas oficinas del mundo, relacionado con el uso indebido de 41 recursos genéticos de origen peruano y conocimientos tradicionales de los pueblos indígenas.
Según la Comisión Nacional contra la Biopiratería, del total de casos detectados 82 han sido resueltos favorablemente para el Perú, mientras que el resto se encuentra en proceso ante las diversas oficinas de propiedad intelectual.
Se precisó que la Comisión Nacional contra la Biopiratería fue creada para proteger el acceso a los recursos genéticos de origen peruano y a los conocimientos colectivos de los pueblos indígenas, mediante la Ley N°28216, publicada el 01 de mayo de 2004. Esta Comisión se encuentra adscrita a la Presidencia del Consejo de Ministros, está conformada por 13 instituciones, y es presidida por el Indecopi.
Es el acceso y uso no autorizado y no compensado de recursos biológicos o conocimientos tradicionales de los pueblos indígenas, en contravención de los principios establecidos en el Convenio sobre Diversidad Biológica y las normas vigentes sobre la materia.
El Perú estuvo entre los primeros 51 países que hicieron posible la entrada en vigor del Protocolo de Nagoya en 2014, y es el único estado que cuenta con una Comisión Nacional contra la Biopiratería, creada en el 2004.
El Estado peruano cuenta con derechos soberanos sobre sus recursos genéticos, tal como los pueblos indígenas cuentan con derechos sobre los conocimientos colectivos que han creado, desarrollado y preservado a través de los siglos. Cuando se accede a estos recursos o a los conocimientos mencionados sin respetar los derechos del Estado o de los pueblos indígenas, entonces existe biopiratería.