Se espera que el parlamento de Indonesia apruebe una nueva ley penal este mes que castigará el sexo fuera del matrimonio con prisión de hasta un año.
Bambang Wuryanto, un político involucrado en el borrador, dijo que el código podría aprobarse la próxima semana.
La ley, si se aprueba, se aplicaría tanto a los ciudadanos indonesios como a los extranjeros.
El castigo por adulterio sólo puede surtir efecto si hay partes que presentan denuncias a las autoridades.
Para aquellos que están casados, la parte con derecho a presentar una denuncia es el esposo o la esposa del perpetrador.
La ley también permite a los padres de personas solteras denunciarlas por tener relaciones sexuales.
La cohabitación antes del matrimonio también estará prohibida y los condenados podrían enfrentar una sentencia de prisión de seis meses.
Los grupos empresariales han expresado su preocupación por el daño que las reglas podrían hacer a la imagen de Indonesia como destino de vacaciones e inversión, según Reuters.
Shinta Widjaja Sukamdani, vicepresidente de la Asociación de Empleadores de Indonesia (APINDO), dijo: “Para el sector empresarial, la implementación de esta ley consuetudinaria creará inseguridad jurídica y hará que los inversores reconsideren invertir en Indonesia”.
El borrador anterior del código estaba programado para seraprobado en 2019, pero provocó protestas en todo el paíscon decenas de miles de personas que participaron en manifestaciones.
Muchos, incluidos estudiantes, salieron a las calles en ciudades de toda Indonesia y los principales enfrentamientos tuvieron lugar en la capital, Yakarta.
Se utilizaron gases lacrimógenos y cañones de agua contra los manifestantes que habían arrojado piedras a la policía.
La policía de Yakarta luchó contra los manifestantes en 2019 que estaban enojados por una nueva ley de corrupción y un código penal propuesto.
Tales leyes estrictas sobre sexo y relaciones no carecen de precedentes en partes de Indonesia, de mayoría musulmana.
La provincia de Aceh aplica la estricta ley islámica y ha castigado a las personas por apostar, beber alcohol y reunirse con miembros del sexo opuesto.
En un caso en 2021, los vecinos denunciaron a dos hombres por tener relaciones sexuales. Cada uno recibió 77 latigazos de un oficial de policía en una flagelación pública.
El mismo día, una mujer y un hombre recibieron 20 latigazos cada uno por haber sido atrapados muy cerca el uno del otro, y dos hombres recibieron 40 latigazos cada uno por emborracharse.
