Durante décadas, un misterioso enjambre de terremotos ha retumbado bajo la pequeña ciudad de Pahala, cerca de la costa sur de la isla de Hawái. En 2015, el ritmo de los temblores subterráneos había pasado de unos siete a 34 seísmos por semana. Y el año siguiente a la erupción del Kilauea en 2018 (la mayor que se ha producido en Hawái en siglos), los temblores alcanzaron un punto febril.
Casi 500 terremotos sacudieron debajo de Pahala cada semana, y la actividad intensificada no ha disminuido. “Somos como la central de terremotos aquí abajo”, dice Lou Daniele, director general de Ka’u Coffee Mill en Pahala. “Se ha convertido en una parte constante de la vida cotidiana”.
Ahora, los científicos han descubierto el origen de este alboroto geológico: una pila de elementos interconectados a entre 35 y 41 metros bajo tierra se está hinchando lentamente con roca fundida. A medida que el magma penetra en estas estructuras en forma de panqueque (conocidas como sills) una cascada de terremotos retumba a lo largo de ellas. Estas raíces magmáticas pulsantes pueden incluso proporcionar un conducto que lleve roca fundida hacia el Kilauea y el Mauna Loa, dos de los volcanes más grandes y activos del mundo.
“Estábamos flipando”, dice John Wilding, investigador graduado del Instituto Tecnológico de California y autor principal de un nuevo estudio que describe las características geológicas en Science. “Nadie había observado antes directamente actividad magmática a esta escala”.
Los investigadores utilizaron algoritmos de aprendizaje automático para buscar terremotos en los datos sísmicos de la red de sensores del Observatorio Volcánico de Hawái, seleccionando temblores tan pequeños que los métodos anteriores pasaban por alto. El resultado es un retrato asombrosamente detallado del ardiente submundo hawaiano, que promete ayudar a los científicos a desentrañar los procesos geológicos que impulsan los volcanes de la isla.
“Este será probablemente el futuro de la ciencia volcánica”, afirma Matt Burgess, antiguo analista sísmico de Hawái que ha estudiado los terremotos profundos que se producen bajo el Pahala.