El acuerdo entre Qonto y Founderz llega en un momento en el que el interés por la creación de nuevos proyectos empresariales está en alza. Según el último análisis abordado por Semrush, el término “emprendimiento” ha registrado una media de 9.000 búsquedas en 2022. Entre las principales palabras que se han buscado en Google en relación al término destacan “cómo emprender un negocio”, “ideas para emprender”, “formación para emprender” o “requisitos para abrir un negocio en España”. Concretamente, esta última combinación de palabras ha experimentado un crecimiento de un 967%.
En Founderz nos preocupa que haya 100.000 empresas que se crean cada año en España y que, lamentablemente, más de la mitad muere en cinco años y creemos que la educación es un factor clave para que aumente esta supervivencia. Desde la parte de Qonto, ayudamos en toda la gestión a las empresas desde su creación. Entonces, para sentar las bases de conocimiento que permita a los pequeños empresarios alcanzar un mayor éxito, es fundamental esta alianza entre ambos.
La formación que ofrece Founderz, además tiene un precio transparente y honesto. Muy parecido al que ofrecemos en Qonto. Para nosotros es muy importante seguir apoyando al emprendedor y darle todas las herramientas que podamos para que su camino sea lo más simple posible, siempre dentro de las dificultades que conlleva arrancar un negocio.
Son clase cortas, ya grabadas, donde el alumno recibe unos conocimientos que luego tiene que poner en práctica en un grupo con más alumnos para resolver una actividad y un reto. Founderz no da una formación de escuela de negocios, que es más densa, y no es necesario para determinados negocios. Nuestra formación se divide en siete módulos que van desde la ideación del proyecto hasta la salud mental, pasando por aspectos legales y financiación o cómo llegar a los periodistas sin necesidad del apoyo de una agencia de comunicación.
Después de cada clase, el alumno puede enviar una pregunta al profesor a través de video o foto, y el profesor le responderá en un plazo de 72 horas. Se pueden enviar tantas preguntas como se quiera. Al final, muchos alumnos coinciden en las mismas dudas y se pueden emplear videos grabados con anterioridad con los profesores. No tiene sentido que el profesor esté respondiendo a la misma duda cada vez que a alguien se le plantea esta cuando ya hay una respuesta. Además, si la duda planteada por el alumno ya se ha respondido, la recibirá al cabo de cinco minutos.
El programa tiene un director académico que seleccionamos cuando ideamos cada curso. El académico debe tener experiencia en el mundo de la docencia y tenga conocimientos, en este caso, de emprendimiento. Una vez seleccionamos al director académico y llegamos a un acuerdo económico con él o ella, es quien se encarga de buscar a los profesores.
Tenemos claro que respetamos la educación y eso pasa por aceptar que no somos educadores. En lo que compete a la enseñanza, no hay nadie de Founderz que se entrometa; es lo más sagrado para nosotros. En el equipo, actualmente, contamos con 110 profesores impartiendo clase y, a parte, en la empresa somos 26 personas.
La vinculación es muy amplia, al final mucha gente comienza el curso con su empresa ya en marcha y muchos otros que no. Desde Qonto, acompañamos a las empresas ya creadas y los alumnos que las crean con nuestra entidad. Y es que aquí en España el proceso de constitución de una empresa dura una media de 13 días; nosotros hemos conseguido reducirlo a cuatro días, y porque la mitad de esos días el Registro Mercantil tiene que confirmar que el nombre de la empresa no esté ocupado. Es una situación ridícula que tarden 48 horas en un proceso de tan solo unos segundos. Nuestra obsesión es reducir al máximo los plazos y molestar al emprendedor lo mínimo posible. Por la parte de Founderz, una vez terminas el curso y montas tu empresa puedes seguir enviando dudas y siempre podrás acceder a las materias impartidas en el curso, incluso hay veces que marcamos algunas clases como obsoletas, debido principalmente a cambios legales, y enviamos un aviso para que los alumnos puedan actualizar el contenido. La idea es que la comunidad sea un espacio para compartir en los buenos y malos momentos que tiene emprender. Al final hay un montón de gente que está en la misma etapa y que van a entenderte y saber ayudarte en un momento difícil.
Nosotros insistimos en que el objetivo cuando arrancas un negocio no tiene que ser tener éxito a toda costa porque ese es el objetivo que tiene una multinacional cuando comienza un nuevo proyecto. Lo que intentamos es que el emprendedor tenga las herramientas para identificar lo antes posible el fracaso y no estar, por ejemplo, dos años de tu vida en los que has invertido 100.000 euros, de los cuales 50.000 vienen de un préstamo. Si en cambio has estado dos semanas y has dedicado 500 euros, duele menos. Hay que entender que fracasar es un riesgo a la hora de emprender. Los fracasos existen y no hay que esconderlos; todos los emprendedores han fracasado. Lo que nosotros tratamos de enseñar es que, según la estadística, es mucho más probable fracasar por cosas que podrías haber comprobado que no funcionaban; además de estar al tanto de los cambios en el marco regulatorio para no tener ninguna sorpresa administrativa.