La primavera es la estación de las flores, cuando se producen la mayor parte de las floraciones. Pero lo cierto es que hay algunas plantas que florecen durante todo el año y puedes cultivar de forma sencilla para que den color a tu hogar, terraza o jardín de forma permanente. Estas son diez de ellas.
Es una planta muy vistosa, que da flores con colores brillantes como roja, rosa o blanco que pueden nacer durante todo el año. Necesita mucha luz y un riego moderado, porque si se encharca la tierra puede pudrirse, pero tampoco aguanta que esté seca. Lo mejor es comprobar cada cierto tiempo que esté húmeda. Es aconsejable plantarla a base de plantones y trasplantarla a una maceta más grande.
Los geranios son muy elegantes, tolerantes al calor y muy fáciles de cultivar. Hay que plantarla en una maceta mediana o grande, con un suelo rico en materia orgánica al que se le puede incorporar turba o compost, con un buen drenaje para evitar que se acumule demasiado agua.
Florecen año tras año cuando se mantienen en ambientes ligeramente sombreados. No solo las flores son hermosas, también lo son sus hojas. Estas hojas añaden textura a la sensación general de la begonia al proporcionar hojas deliciosamente verdes, grandes y dentadas.
Las hortensias crean una hermosa forma esférica y son una gran opción para las personas que disponen de un espacio limitado. A la hortensia le gusta el riego frecuente y abundante acompañado de luz solar. Es de cultivo muy sencillo, así que se puede considerar apta para principiantes.
Sus flores presentes durante todo el año tienen unas flores de diferentes tamaños, colores y formas. Hay que procurar cultivarlas en una maceta o jardinera con espacio porque se expanden mucho. Son muy resistentes y aguantan cualquier tipo de temperatura y ambiente.
Otra planta muy ornamental gracias a la belleza de sus flores. Es sencilla de cultivar. Sus hojas de forma redondeada de color verde intenso y tacto similar al terciopelo son muy características. Sus flores son casi siempre de color azulado, pero podrían ser también naranjas, rojas o blancas y tienen estambres amarillos.
Otra planta que dará alegría a tu hogar durante todo el año. Tiene origen tropical, por lo que es aconsejable colocarla en el interior del hogar y cerca de la luz solar pero si recibirla directamente. Necesita un riego regular, una o dos veces por semana, evitando que la tierra se seque. Sus flores son amarillas y rosas.
Sus flores blancas, lilas, rosas o rojas en racimos la convierten en una planta muy decorativa, especialmente en terrazas y jardines. De hecho puede llegar a alcanzar hasta los 60 centímetros si no se poda, por lo que en el exterior es muy vistosa. Su cultivo es sencillo, necesita tener siempre la tierra húmeda y un buen drenaje.
La verbena es una de las plantas más coloridas que existen y se pueden planta en diversos colores. Necesita la luz solar de forma continuada, aguanta bien el calor y el riego ha de ser escaso. Su cultivo es sencillo y hay que proporcionarle un buen drenaje en la maceta.
La lavanda lo tiene todo. Es aromática, tiene propiedades medicinales y da lugar a unas flores de color morado de gran belleza. Su cultivo es sencillo, sólo hace falta regarla regularmente y poporcionarle unas horas de luz al día para que florezca todo el año.
