“Mientras no haya normalidad democrática en Perú, no queremos relaciones económicas ni comerciales con ellos (administración de Boluarte)”, anunció este viernes el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, durante su rueda de prensa rutinaria, asegurando que no hay rompimiento con el pueblo peruano.
Al reiterar su postura de no entregarle la presidencia de la cumbre de la Alianza del Pacífico a Dina Boluarte, lo acusó de estar “usurpando la presidencia”.
En este sentido, ratificó su apoyo al conceder la presidencia de la cumbre regional a Chile, buscando analizar el tema con su homólogo chileno, Gabriel Boric. “Si Chile se la entrega a Perú, pues ya es su asunto”, indicó.
Tras señalar que la presidenta peruana, que llegó al poder tras deponer al gobierno democráticamente electo de Pedro Castillo, tiene baja popularidad, advirtió que será de crisis en crisis si no reponen el procedimiento presidencial y no se convocan nuevas elecciones en el país andino.
El presidente de México exige a Dina Boluarte que devuelva el poder al exmandatario Pedro Castillo, una declaración que volvería a encender la pelea verbal.
El jueves, el pleno del Congreso peruano, con 65 votos a favor, 40 en contra y 2 abstenciones, declaró persona non grata al gobernante mexicano, en rechazo de sus declaraciones, tachando de “usurpadora” a Boluarte.
Después de que Castillo fuera destituido en diciembre de 2022, el presidente mexicano ha apoyado en diferentes ocasiones al presidente izquierdista que, según AMLO, cayó como resultado de un golpe y proceso no constitucional. La tensión se agravó cuando México asiló en su territorio a la esposa e hijos del exmandatario Castillo.
