Más de 130 actores se prepararon arduamente por más de dos meses, para hacer vivir a los fieles el Vía Crucis de Jesús de Nazareth y sus estaciones este último viernes santo en Paucarpata – Arequipa. Aunque, curiosamente, en los ensayos no faltaron algunos acontecimientos extraños que vivieron los actores.
El personaje principal (Jesucristo), interpretado por Javier Diaz de 33 años, nos relató que empezó a experimentar diversos cambios personales, tanto mental como físicamente, motivado por su tío, quien también actuó de Jesús años anteriores a la pandemia.
“Me pasaron cosas que jamás me imaginé que me iban a pasar (risas), enfermé. Nadie sabe cómo, pero me enfermé y repentinamente me curé, me dijeron que a otros cristos les suceden cosas así y me recomendaron que ore por el grupo y por mí. Gracias a Dios estamos todos bien. Por otro lado, mi tío, quien también hizo de Jesús, me dijo que es una experiencia bonita y que me marcará para toda la vida”
Javier Díaz, actor que interpretó a Jesús
Así mismo, el actor que interpretó a Pilatos, Edwin Senty, quien lleva 35 años siendo parte de la escenificación, confesó sentirse muy mal cuando miraba los azotes que le propinan a Jesús. Además, recomendó a la población y autoridades a no actuar como su personaje, sino más bien apoyar al prójimo.
“Durante los ensayos, algo te hace cambiar, lo malo que fuiste por lo bueno que puedes ser. Algo anecdótico que nos pasó es que varios personajes principales, entre ellos quien les habla, nos enfermamos, pero también nos hemos recuperado rápido, creemos que es la bendición de Dios”
Edwin Senty (Poncio Pi)
Otros actores llevan años actuando, como la actriz Marina Rojas, quien representa a un mujer samaritana. Ella viene participando 43 años y nos narra que siempre vivió en Paucarpata y su primer papel fue el de una niña, luego paso a ser parte del pueblo y ahora actuó de samaritana.
Por su parte, la Virgen María, fue interpretada por Rocío Huaynazi. Este año 2023, ella actuó por segunda vez, pero también cumplió 43 años de vida actoral por cada escenificación.
Problemas con el público asistente a la escenificación de Paucarpata
Varios actores que conformaron la muchedumbre, se quejaron con justa razón de que muchas personas que vinieron a ver el espectáculo, invadieran áreas donde se iban a realizar algunas escenas. Esto generó uno que otro enfrentamiento verbal, pero no pasó a mayores.
Al final de la escenificación, las personas calificaron la actuación como muy emotiva, reflexiva y conmovedora. Aunque también pidieron que los coordinadores ayuden a organizar mejor al público para que todos puedan disfrutar de la puesta en escena.
“Fue mágico cuando Jesús me miró unos segundos cuando caminaba con sus discípulos, sentí mucha paz, alegría interior, ver también la inocencia de los niños que acompañaban a Jesús me conmovió mucho.”
Turista (espectadora)
Todos los actores y público esperan con ansias que el Ministerio de Cultura declare la tradicional escenificación en Paucarpata como patrimonio inmaterial de la nación.
